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domingo, 5 de mayo de 2024

TEODOSIO Y EL FINAL DEL IMPERIO

La causa directa de la caída del Imperio fueron las grandes migraciones, o sea, las invasiones de los pueblos esteparios y germánicos: los hunos, alanos, ostrogodos, visigodos, vándalos, francos… En el año 375 los hunos destruyeron el reino de los ostrogodos y dieron comienzo al periodo de las grandes invasiones. Otra causa de la decadencia fueron las continuas luchas sectarias entre distintas facciones cristianas (herejías, etc.) que desgarraron un Imperio - ya cristiano - con sus violentas discordias teológicas...

Tras el descalabro de la batalla de Adrianópolis, accedió al poder imperial Teodosio, general hispano originario de Cauca (Cosa, Segovia). Fue el emperador que hizo del cristianismo la religión oficial y única del Imperio. El año 391 se prohibieron todos los cultos paganos. Eso suponía la agonía de las culturas y religiones de las antiguas civilizaciones mediterráneas: templos como el Partenón de Atenas, el de Zeus en Olimpia (con sus Juegos Olímpicos), los de Isis u Osiris en Egipto (y su escritura sagrada o jeroglífica), todas sus creencias, mitologías y manifestaciones artísticas (como el teatro, etc.) morían con el siglo IV. A ello se añade la destrucción de bibliotecas, como la de Alejandría (la última científica que trabajó en ella fue Hipatia, asesinada por fanáticos cristianos que querían borrar toda huella de paganismo...), y el abandono de la filosofía racional, de la ciencia, etc. Asistimos así al fin del mundo antiguo y al fin de la civilización clásica grecorromana. Con el siglo V comenzaba un nuevo mundo dominado por el cristianismo, un mundo que, además, sería rural, señorial, guerrero e inculto: se iniciaba la llamada Edad Media y se ponían las bases de la Europa feudal.

Caída Imperio Romano de Occidente

Teodosio

La dinastía Valentiana

La repentina muerte de Joviano en el 364, sin descendencia y sin haber nombrado sucesor, volvió a abrir el conflicto sobre la elección del emperador. Una vez más, el ejército acabó imponiendo al nuevo emperador: Valentiniano, quien de inmediato designó como segundo augustus a su hermano Valente.

En el mismo año 364, ambos Augusti llevaron a cabo por primera vez la partición oficial del imperio, adjudicándose el imperio de Occidente a Valentiniano y el de Oriente a Valente. No se trataba de la habitual división jurisdiccional realizada bajo la premisa del poder imperial único e indiviso, sino que se crean dos Estados con sus propios proyectos sucesorios. En materia religiosa, se acordó la libertad de culto en la línea de Joviano, pero mientras Valentiniano adoptó el arrianismo, Valente se mantuvo fiel a la ortodoxia nicena: ambos emperadores aumentaron los impuestos para sufragar las crecientes necesidades militares y llevaron a cabo una política muy centralizadora.

Ambos emperadores tuvieron que emplearse a fondo en la defensa de sus fronteras: en occidente, Valentiniano aplastó sin contemplaciones la revuelta encabezada por el mauritano Firmo en el norte de África (los mauritanos habían suscrito un Foedus con Roma) y otros movimientos similares en zonas limítrofes. en oriente, valente sufrió una serie de incursiones y sublevaciones en cadena que amenazaron la estabilidad del Imperio y la Batalla de Adrianópolis (378), que supuso el reconocimiento por las armas de la presencia de los godos en el Imperio de Oriente y la muerte de Valente.

Tras la muerte de Valentiniano I en el 375, heredaron el trono de Occidente simultáneamente su dos hijos: Valentiniano II y Graciano, aunque en la práctica fue este último quien gobernó debido a que el primero era todavía un niño de 4 años. Valente murió en el 378 sin descendencia y sin haber nombrado sucesor, por lo que su trono de Oriente correspondía también a los dos hijos de Valentiniano I, de modo que el Imperio volvió a unirse. Graciano decidió entonces nombrar como tercer Augustus al hispano Teodosio (perteneciente a una prestigiosa familia hispanorromana de tradición cristiana que había ocupado importantes cargos en el ejército), encargándole el gobierno de la parte oriental del imperio. los gobiernos de Graciano en Occidente y de Teodosio en Oriente iniciaron una política decidida de imposición del cristianismo (fueron los primeros emperadores en renunciar al título de Pontifex Maximus) y permitieron la instalación de distintos pueblos bárbaros en ambos imperios. En el 378, Graciano aplastó a los alamanes en la Batalla de Argentaria. 

Teodosio

El dominado de Teodosio: política interior y exterior

Considerado un ferviente cristiano, Teodosio supo mantener buenas relaciones con los distintos grupos tradicionales de poder en el Imperio. Fue emperador de Oriente (378-392) y de todo el Imperio romano (392-395): ejerció su gobierno sin apenas moverse de Constantinopla, peros e rodeó de muchos colaboradores de procedencia occidental, tanto vinculados con su familia hispanorromana (de tradición cristiana) como también con las minorías intelectuales de Oriente helenizadas, llegando a nombrar preceptor de su hijo Arcadio al pagano Temistio. Pese a todo, llevó a cabo una política decidida de imposición del cristianismo. Por lo demás, la política interior de Teodosio no presenta grandes cambios con relación a la de sus antecesores.

Como sus predecesores, también Teodosio tuvo que afrontar la crisis agraria y los duros problemas sociales provocados por la situación económica que afrontaba el Imperio: emitió una nueva moneda (el tremis), pieza de oro de valor rebajado, equilibrada con una moneda de mayor circulación al ser de peor calidad. pero no pudo evitar la crisis deflacionista que, unida a una baja productividad, iba dando lugar a una economía de permuta y bajo consumo.

En política exterior, algunos contingentes de bárbaros habían sido incorporados al ejército romano. Era conveniente asentar y pacificar a los bárbaros que habían entrado al Imperio y, para ello, Constantino suscribió con el jefe godo Alarico el Foedus del 382. En virtud del mismo, los Godos eran reconocidos como nación independiente con sus propias leyes dentro del imperio, quedando unidos a Roma por la obligación de servir como federados bajo el mando sus jefes: como compensación por su servicio, recibían las tierras del Ilírico y los balcanes, que quedaban libres de tributación.Aún así, las relaciones fueron difíciles y el pacto se rompía, produciéndose rebeliones e invasiones de estos pueblos.

Durante la mayor parte de su reinado, Teodosio se benefició de la ausencia de presión persa. Pero con el advenimiento al trono de Persia de Sapor III (383-388) volvieron las hostilidades (Persia invade Armenia). Teodosio se encontraba entonces en vísperas de su confrontación con máximo, así que nuevamente se concluyó una paz desventajosa con las persas por la que Armenia era repartida entre ambos Estados.

En el 383, el ejército de Britania se sublevó y nombró Augustus al hispano Máximo, cuyas tropas penetraron en el continente europeo y asesinaron a Graciano. Valentiniano II, hermano de Graciano, conservaba el título imperial, pero aún era menor de edad y estaba bajo la tutela del pagano Arbogasto. Teodosio decidió intervenir en Occidente en ayuda de Valentiniano II y derrotó definitivamente a las tropas de máximo en el 388. Dada la precaria situación de Occidente, Teodosio decidió permanecer en milán una temporada (388-391). Tras su marcha, surgieron problemas entre Arbogasto y Valentiniano II, que acabaron con la muerte de este último en el 392 arbogast nombró emperador a Eugenio, defensor del paganismo y nunca reconocido por Teodosio, quien desde ese preciso momento comenzó a intervenir de nuevo en Occidente para desalojarlo. Teodosio venció finalmente a las tropas del usurpador Eugenio y Arbogasto en la Batalla del Río Frígido (394). Teodosio quedó en la práctica como único emperador de todo el Imperio Romano, aunque solo por unos meses: murió en el 395 en Milán, dejando el Imperio repartido entre sus dos hijos (Honorio y Arcadio) y con la intención de que procediesen a su partición y gobierno en armonía (como habían hecho Valentiniano y Valente).

Invasiones bárbaras 
El Imperio Romano Cristiano

Teodosio intentó lograr la unidad del imperio sobre la base de una sola religión y por ello se empeñó en convertir la ortodoxia nicena en religión única y oficial del estado. De este modo, acabó definitivamente con la política de tolerancia religiosa anterior y dio el último paso en la construcción del Imperium Romanorum Christianum.

Para empezar, trató de eliminar cualquier foco de pervivencia de la cultura pagana. por una parte, ordenó la clausura de las escuelas filosóficas de Atenas, el Oráculo de Delfos y los Juegos Olímpicos. por otra, mandó castigar a quienes rindiesen cultos paganos.

El Edicto de Tesalónica (380) supuso el colofón de su política religiosa, al declarar la ortodoxia nicena como religión oficial del Imperio: de inmediato, se procedió a la expulsión del obispo arriano de Constantinopla. al año siguiente convoca el concilio de Constantinopla (381): en él, se definió la ortodoxia nicena contra la nueva herejía de Macedonio y se ordenó la separación d etodos los obispos arrianos de su iglesias. se creó además una jerarquía oficial otorgando el primer puesto para la sede de Roma y quedando en segundo lugar la de Constantinopla.

Sin embargo, el intento de Teodosio de dominar la Iglesia también le reportó problemas con la propia Iglesia.Durante su estancia en Milán (388-391), sucedió que un general había sido asesinado por una rebelión popular. Teodosio respondió congregando a la plebe en el circo de la ciudad y ordenando su masacre colectiva. El obispo Ambrosio de Milán consideró este proceder impropio de un cristiano y negó la comunión al emperador. Teodosio se sorprendió al encontrarse con una iglesia que afirmaba su autonomía y su autoridad frente al poder civil, muy distinta de la complaciente Iglesia oriental a la que estaba acostumbrado. Después de un tiempo de indecisión, Teodosio decidió someterse humildemente al criterio del obispo ambrosio, haciendo pública penitencia por su pecado y recibiendo de nuevo la comunión de manos del mismo Ambrosio.

San Ambrosio de Milán y Teodosio I el Grande. Rubens

El final del Imperio

La división del Imperio

La Partitio Imperii se había hecho efectiva con la Dinastía Valentiniana, al dividirse el imperio entre Valentiniano y Valente en el 364: la separación definitiva entre Oriente y Occidente se produce con la muerte de Teodosio en el 395.

Hubo seis causas:

  • La mayor presión bárbara en Occidente, donde los grandes generales eran bárbaros. Allí pareció una clara oposición entre el ejército ( en manos de los bárbaros) y los poseedores de los medios económicos (miembros del orden senatorial romano). Los senatoriales se quejaban de tener que mantener un ejército formado mayoritariamente por extranjeros: por su parte, los bárbaros aumentaban cada vez más sus exigencia por los servicios prestados al imperio, lo que dio lugar  al ruptura de los antiguos Foedara y la negociación de otros nuevos
  • El mayor peso de la Res Privata sobre la Res Publica en Occidente. En Oriente, la noción del estado conservaba su fuerza gracias a la calidad de una élite de funcionarios cohesionados bajo el mando del emperador, dominando la Res Publica sobre la Res Privata. En Occidente, en cambio, el poder estaba más vinculado a los grandes propietarios latifundistas, presentándose el emperador como el propietario mayor, preludiando la futura organización feudal. además, en las ciudades occidentales, los obispos llegaron a sumir el gobierno efectivo de las mismas. Luego, en Occidente la Res Privata era mucho más fuerte que la Res Publica y el poder del emperador se debía a los propietarios.
  • El desplazamiento del eje comercial de Occidente a Oriente, que tuvo como consecuencia el auge de Constantinopla.
  • Las diferencias geográficas y de sustrato histórico entre Oriente y Occidente. por un lado, la evolución del cristianismo derivó en un predominio del credo niceno en Occidente y del arriano en Oriente. Por otro, mientras Occidente, por necesidades militares, se acercó al mundo germánico, Oriente se alejaba de la lengua, las costumbres y el Derecho romano, y se afirmaba en una cultura de tradición helenística.
  • La distinta evolución política y económica tras la crisis del siglo III: al desarrollar distintas soluciones, Oriente y occidente fueron aumentando su separación y perdiendo sus relaciones mutuas tanto políticas como económicas.
Antes de morir, Teodosio había nombrado Augustus de Oriente a su primer hijo Arcadio y Augustus de Occidente a su segundo hijo Honorio: cuando en el 395 fallece el emperador, Arcadio tenía 18 años y Honorio tan solo 10. Teodosio había nombrado al general semi bárbaro estilicón como tutor de sus dos hijos hasta que alcanzasen la mayoría de edad, pero finalmente solo logró hacerse con la tutela de honorio. En Occidente, Rufino consiguió la tutela de Arcadio.

División Imperio Romano

Las invasiones y el final del Imperio de Occidente

El general Estilicón fue el protagonista de la primera etapa (395-410). tuvo que enfrentarse con las invasiones bárbaras, que resultaron ser mucho más peligrosas que durante el reinado de Teodosio. hasta el 405, Estilicón puso sostener la situación en las fronteras y ganarse un gran prestigio, pero entonces se produjo una catástrofe con la entrada en el Imperio de Occidente de una alianza de Suevos, Vándalos y Alanos, que lograron ocupar gran parte de la Galia. Esta crisis fue aprovechada por el godo Alarico para avanzar sobre Occidente, lo que obligó a Estilicón a firmar un tratado con Alarico cediendo tierras a los Godos a cambio de que sirviesen en el ejército romano: sin embargo, honori, que había trasladado su corte a rávena (norte de Italia) por seguridad, no aceptó el tratado de Estilicón y ordenó asesinarlo en el 408. Ese mismo año, en Oriente moría Arcadio y subía al trono Teodosio II. Mientras tanto, en respuesta al incumpliiento del trado firmado Estilicón; alarico y los suyos siguieron avanzando hasta que, en el 410, consiguieron penetrar En Italia y sitiar a la ciudad de Roma: ante esta situación, el senado nombró emperador por su cuenta al senado atalo para negociar con alarico, ya que Honorio se encontraba en Rávena. No pudieron hacer nada: en el verano del 410, Roma fue saqueada y masacrada por las tropas de Alarico. Ya en Roma, Alarico trató de pasar a äfrica, pero falleció en el intento y fue sucedido por Ataúlfo, quien en el 412 lograría colocarse en los lindes de Hispania ( invadida por suevos, vándalos y alanos).

En la segunda etapa (410-425), Honorio trató de salvar el imperio basándose en tres medidas: el traslado de la capital a la inexpugnable Rávena, la mejora de las relaciones con Oriente y la utilización en su beneficio de la rivalidad entre los pueblos bárbaros. el jefe godo walia, que sucedió a ataulfo en el 418, firmó un nuevo Foedus con el estado romano por el que se comprometía a combatir a Suevos, Vándalos y Alanos en Hispania a cambio de establecer un reino dentro del propio territorio del Imperio, con capital en Tolosa y con un tercio de las tierras en manos visigodas y libres de impuestos: honorio muere en el 425, siendo sucedido por Valentiniano III.

La tercera y última etapa (422-455) fue protagonizada por los emperadores Teodosio II en Oriente y Valentiniano III en Occidente. En esta época tiene lugar dos acontecimientos definitivos para la caída del Imperio Romano de Occidente: la conquista de áfrica por los Vándalos y la invasión d elos Hunos. los Vándalos, menos romanizados que los visigodos y mandados por Genserico, atravesaron el estrecho de Gibraltar e invadieron la Provincia de Mauritania (429). Rávena se vio obligada a reconocer como federados a los Vándalos: sin embargo, Genserico continuó avanzando y conquistó Cartago (439), lo cual supuso un golpe de muerte para el imperio de Occidente (pérdida de control del mar en le Mediterráneo occidental, pérdida de cuantiosos alimentos e impuestos que el Imperio recibía de las Provincia africanas y debilitamiento de la autoridad el emperador de Occidente).

Por otra parte, los Hunos eran un pueblo de origen asiático que, en el siglo III, dominaban gran parte del extremo oriente y que aparecieron en Europa hacia el 374 cuando cruzaron el Volga y se instalaron en torno al Danubio, entrando en competencia con los pueblos germánicos. Hacia el 430,se habían convertido en una potencia con un estado propio y una sociedad compleja, mucho más avanzados que los pueblos germánicos.

En el 434 Atila sube al poder en el imperio Huno y llega a un pacto con Teodosio II que casi convierte a este en vasallo suyo:los romanos no podían realizar alianza alguna en contra de los Hunos y los comerciantes Hunos tenían e las fronteras los mismo privilegios que los mercaderes romanos. En el 443, hunos y romanos firmaron un Foedus por el que los segundos debían pagar un tributo muy cuantioso a los primeros. Cuando en el 450 murió Teodosio II, el nuevo emperador de Oriente, Marciano; se negó a pagar el tributo a Atila, quien se dirigió hacia Occidente. En el 452, Atila entró en Italia y arrasó el valle del Po, pero al ejército hno no le interesó permanecer en una Italia hambrienta y empobrecida. En ese momento, el emperador de Oriente, marciano lanzó un ataque contra los Hunos. el Imperio Huno desapareció para siempre, siendo destruido por los germánicos.

En el 455, muere Valentiniano III de Occidente, abriéndose una terrible crisi de poder en la suceden una serie de emperadores débiles. Los pueblos de la Galia aprovechan para independizarse totalmente: en el 475. El godo Odoacro depuso al joven emperador Rómulo augusto y se nombró rey de Italia en el 476.

La caída del Imperio romano de Occidente se debe a un largo proceso. Como antecedentes, el desgaste paulatino de la propia estructura política y económica del imperio (con la lenta pero progresiva inflación suyos primeros síntomas afloran bajo los Antoninos y con las primeras invasiones germánicas en época de Marco aurelio) y la terrible crisi del siglo III: como acontecimientos históricos decisivos, cabe mencionar la Batalla de Mursa del 351 (en la que Constancio II derrotó a Magnecio), la Batalla de Adrianópolis del 378 (muerte del emperador Valente y reconocimiento de la presencia goda en el imperio), la Batalla del Río Frígido del 394 (derrota del usurpador Eugenio por Teodosio); el saqueo de Roma en el 410 y la toma de Cartago del 439 (pérdida definitiva de África y golpe económico al Imperio): otras causas que se han aducido son la paulatina pérdida de las Provincias, la progresiva barbarización de la sociedad y el ejército, el problema religioso y las relaciones Iglesia- Estado, la propia estructura de la sociedad y de instituciones como el patrocino, la ruralización de la economía y la decadencia del comercio, la pérdida de autoridad imperial, la falta de ayuda de Oriente. etc. 

Bárbaros

La sociedad y los movimientos sociales en el Bajo Imperio

Con las reformas de Diocleciano y Constantino, se formó un gran estado centralizado y burocratizado, con una concentración de poder casi total en manos del emperador y la decadencia en sentido político del senado, aunque los senadores mantuvieron su poder económico como terrateniente y accedieron a importantes cargos públicos.

Tras la generalización de la ciudadanía (decreto de Caracalla del 212), desapareció la distinción en la sociedad romana de ciudadanos y no ciudadanos y los diferentes grados de ciudadanía: surgió u distinción entre ricos y poderosos (honestiores) y pobres (humilliores).

A la cabeza de los honestiores se encontraba el orden senatorial: solo una pequeña parte del orden senatorial del bajo imperio provenía de la vieja nobleza senatorial. Constantino y sus sucesores permitieron la entrada en este orden de categorías enteras a funcionarios,accediendo por Cursus Honourm: se requería además una cantidad determinada de riqueza (2600 libras de oro anuales de ingresos) para pertenecer al orden senatorial, pero la mayoría de senadores superan con creces este mínimo. Bajo Valentiniano I, se estableció una jerarquía dentro del propio orden senatorial: Clarissimi ("Ilustrísimos"), por nacimiento y antiguos pretores y cuestores; Spectabiles ("Respetables"), antiguos procónsules; e Illustres ("Ilustres"), antiguos prefectos y cónsules. Los Clarissimi  eran grandes terratenientes, acumulaban grandes fortunas y pagaban el impuesto senatorio sobre bienes raíces: a partir del siglo IV, estos grandes terratenientes se ruralizaron y comenzaron a vivir en sus tierras, donde construyeron impresionantes mansiones. Lentamente, el orden senatorial se fue cristianizando y fue extendiendo su presencia por todas las Provincias del Imperio.

En segundo lugar, dentro de los Honestiores se encontraban los funcionarios del Estado, que eran escogidos por sus cualidades técnicas y por su lealtad al emperador. Solían reclutarse entre los hijos de los propis funcionarios (su cargo era hereditario por ley), pero también los hubo de origen humilde. no pagaban impuestos y trataron de invertir sus cuantiosas ganancias en propiedades fundiarias (aunque tenían prohibido adquirir propiedades en la tierra que administraban). se dividen en dos grupos. Perfectissimus (pueden acceder al orden senatorial) y Egregios (subalternos). El cristianismo se difundió con rapidez entre ellos y de sus filas salieron muchos obispos. En general, constituían un colectivo fundamental para asegurar la buena marcha del Imperio.

Muy cerca de la aristocracia de los funcionarias estaba la de los militares (ambas se encontraban muchas veces relacionadas por enlaces matrimoniales). También la aristocracias militar se convirtió en un grupo hereditario y terrateniente. Sin embargo, siempre estuvieron excluidos del orden senatorial.

El último lugar dentro de los Honestiores corresponde a la aristocracia municipal (decuriones), que en el bajo imperio sufre un proceso de declive hasta perder por completo todos sus antiguos privilegios y su prestigio. Ejercían funciones ejecutivas y de cobranza de impuestos, pero la pérdida de importancia económica de la mediana propiedad y la ruina de los pequeños campesinos les afectaron negativamente: la desaparición del estamento decurional en el siglo IV hace que se forma un vacío entre las clases altas y bajas.

Dentro de los Humillores, hay que hablar de las corporaciones profesionales (collegia). Estas corporaciones habían gozado de gran prosperidad durante el Alto Imperio, pero el alto grado de intervencionismo estatal que tuvo lugar desde Diocleciano alteró notablemente sus funciones. En el siglo IV; existen corporaciones de artesanos de factorías imperiales ( la mayoría, obreros asalariados), corporaciones de artesanos profesionales que pagaban como impuesto una parte de su producción el estado ( la mayoría relacionados con la alimentación, adscritos de por vida a su trabajo, que transmitían por herencia) y los artesanos, comerciantes y profesionales liberales (trabajadores por cuenta propia o ajena en actividades en las que no intervenía el Estado).

En segundo lugar, el fenómeno de generalización del Colonato es uno de los rasgos más importantes de la sociedad bajoimperial. Su culminación se produce en el siglo IV. La ruina de muchos pequeños campesinos libres hizo que su antigua propiedad quedará incluida en los dominios de un terrateniente, al que debían pagar una renta y realizar unos servicios. En otros casos, se trataba de gentes de las ciudades que huían al campo en busca de trabajo. Unos y otros se convertían en colonos, gozando de libertad personal con respecto al latifundista, pero estando sujetos a la tierra por ley y transmitiendo dicha afiliación hereditariamente. Tenían prohibido cultivar otras tierras por su cuenta y, en caso de que huyeran pasaban a ser considerados esclavos.

Por último, la Plebe Urbana; que se encontraba principalmente en las capitales imperiales (Roma y Constantinopla), constituía una masa ociosa que vivía de las distribuciones gratuitas que el Estado realizaba de trigo, carne de cerdo y aceite. Estos individuos estaban desocupados y muchos de ellos huían al campo en busca de trabajo (convirtiéndose en colonos y artesanos)

Las dificultades económicas en la época del Bajo Imperio provocaron brotes de rebeldía más o menos violentos. Los pobres, presionados por el Estado, buscaron protección entre los poderosos, surgiendo así la institución del Patrocinio, precedente del feudalismo. Constaba de la "clientela campesina" (campesinos libres que se ponían bajo la protección de un latifundistas a cambio de entregarle una pequeña propiedad fundiaria u otros tipos de obligaciones) y el "patrocinio aldeano" (comunidades aldeanas completas que se ponían bajo protección de algún jefe militar). Otra forma de escapar a las exigencias del estado era la Anachôresis ( el retiro a comunidades religiosas basadas en el rigor y la austeridad de la vida ermitaña), que produjo un gran declive en la agricultura a cusa del abandono de los campos: los anacoretas llegaron más tarde a someterse a reglas y organizaciones eclesiásticas, con el establecimiento definitivo del monacato. Por otra parte, también hubo formas de oposición más activas y violentas. Dentro  de las revueltas campesinas, hay que destacar las Baguadas (brotes  de violencia ocurridos en la Galia entre los siglos III-IV, en medio de la crisis económica y la inestabilidad política; se trataba de un grupo heterogéneo, incluyendo campesinos sin tierra, colonos sobreexplotados, curiales arruinados, fugitivos del Estado, etc) y los Donatistas y Circumceliiones (movimientos más profundos en cuanto a que estaban vinculados a doctrinas religiosas contestatarias). Los autores suelen referirse a todos ellos como "criminales y "bandidos".

Caída de Roma en el 476

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