MATERIALES Y TÉCNICAS CONSTRUCTIVAS
Para el conocimiento de la edilicia romana no sólo contamos con las fuentes arqueológicas, ya sean las canteras o los restos arquitectónicos, sino también con fuentes escritas y entre ella es imprescindible la obra de arquitectura, compuesta por 10 libros y escrita por Vitrubio en época de César y de Augusto, que aporta una información preciosa de tipo técnico, metodológico e histórico.
Materiales
El uso del material de construcción varía dependiendo del destino del edificio, de sus dimensiones, de su situación, de la disponibilidad financiera de la empresa, de las preferencias personales y culturales del cliente y del arquitecto.
La piedra
Los primeros materiales pétreos que se utilizan en la construcción de la ciudad de Roma desde el siglo VI a.C. son los siete tipos de tufo1. Y finales del siglo II a.C. se comienza a usar el travertino (caliza de las canteras de Tivoli) ya que es más sólido y duradero que el tufo. A mediados del siglo I a.C. ya se utiliza el mármol de Carrara que llegaba a Roma por mar, al puerto de Ostia.
Otros mármoles venían importados de Grecia, Egipto, África…; se usaban para las partes decorativas de los edificios, como las columnas, los revestimientos parietales y los pavimentos. A partir del siglo IV d.C. comienza a disminuir la importación y se empieza a reutilizar el mármol decorativo de los edificios imperiales. Este hecho se incrementa durante el Medievo en los edificios que estaban ya en ruinas y eran una cantera de materiales preciados para la construcción de los nuevos templos cristianos.
Los constructores romanos utilizan para la mampostería los diversos tipos de piedra local y sólo los materiales destinados a las partes nobles de los edificios son importados.En las canteras cunado los bloques ya estaban preparados se transportaban al edificio con rodillos y cuerdas y utilizaban máquinas de elevación para las zonas más altas (cabria), además para izar los fustes monolíticos de columnas se utilizaba una máquina con dos postes en forma de ángulo recto, donde el inferior se ataba al fuste y el superior se sujetan los cables para levantar el bloque (fig. 1).
El uso de mortero para la unión de sillares solamente se constata en edificios de poca calidad que recibían un nuevo enlucido posterior y cuando los monumentos estaban construidos con un relleno de opus caementicium, sobre el que se disponía el parlamento de sillares.
La arcilla
La maleabilidad, que permite la realización de formas diversas, sobre todo, su solidez tras el secado y la cocción, convierten a la arcilla en un material esencial para la construcción.
La fabricación de tapial y de adobe consistía en colocar la arcilla en una fosa con agua para amasarla junto con un desengrasante, ya sea vegetal (paja, hierba) o mineral (arena, gravilla).
Para construir los muros con tapial era imprescindible un armazón de madera que tuviera la anchura que se quería en el muro, en cuyo interior se divierte la arcilla, siempre encima de un zócalo de piedra. Y una vez seca se retiraba el armazón.
Los adobes son ladrillos de arcilla que se secan al sol y que se unen al muro mediante una lechada de arcilla húmeda. Para lograr la forma que se busca se usan moldes de madera sin fondo.
La cocción de los ladrillos se hacía en hornos similares a los cerámicos; tienen una cámara de caldeo que está enterrada en el suelo, con una abertura para introducir el combustible y recubierta por una bóveda de ladrillos como orificios que dejan pasar el calor. La cámara de cocción se sitúa en la zona superior y los materiales se introducen por una puerta que se tapia durante el proceso de cocción
La difusión del ladrillo comienza en época de Augusto aunque sólo se emplea en estancias con alto índice de humedad; ya en la época de Tiberio se generaliza el uso en los paramentos, denominados(opera testacea). Los ladrillos se fabrican según medidas estandarizadas, (bessales 19,7cm, semilaterales 44,4cm, bipedales 59,2cm…) y además existe una forma específica destinada a las termas (tubuli de forma tubulary tegulae sin bordes), usados para la eliminación del humo y la circulación del aire caliente.
Los fabricantes de ladrillos marcan sus producciones en las estampillas con el nombre de la persona que dirige la producción y que depende del dominus en calidad de arrendatario officinator, el lugar de procedencia de la arcilla figlina, las fechas consulares.
El mortero
El mortero es una argamasa formada por cal (gran aportación de los romanos a la historia de la edilicia) y arena. La cal se obtiene tras un proceso que empieza con la cocción en hornos de piedra calcárea que produce óxido de calcio “calx viva”, ésta se deposita en fosas donde se moja con agua y se calienta hasta los 300º, al enfriarse y pulverizarse se consigue la cal “calx exstinta” que es la usada en la construcción y en el momento de la utilización se moja para formar una pasta homogénea que, unida a la reina, forma el mortero.
Una vez fabricado el mortero se traslada a la obra y se coloca entre las juntas de piedras o ladrillos y se enlucen las paredes; el mortero se mezcla con mampuestos para la fabricación del opus caementicium, material que se considera el gran hallazgo de la edilicia romana; se usa desde el siglo III a. C. y actúa de relleno entre dos paramentos realizados con sillares, mampuestos o ladrillos, aunque sólo para edificios de poca calidad (fig.3).
Cimentaciones
Las cimentaciones soportan el peso de la estructura y lo trasmiten al terreno de la forma más uniforme posible para asegurar al edificio la máxima estabilidad. Yegún Vitrubio para que sean adecuadas es necesario excavar hasta llegar a un suelo sólido (roca).
Las cimentaciones pueden estar realizadas con piedras irregulares dispuestas a seco y van evolucionando hacia un tamaño de piedras uniformes y unidas con mortero. Un segundo tipo son los grandes bloques de piedra escuadrados en seco que se usan con anterioridad a la difusión del opus caementicium, para los edificios importantes; en esta estructura la trinchera debía ser ligeramente más amplia y el plano inferior de la cimentación era más ancho que el superior. Cuando comienza a difundirse el opus caementicium se abandonan los grandes bloques y para este tipo de cimentación debían encofrarse las franjas mediante tablas de madera, donde se vertía el mortero, si bien en ocasiones y cuando el terreno permitía se disponía directamente en la trinchera excavada.
Aparejos murarios
Grandes aparejos
Las primeras construcciones pétreas romanas son las fortalezas de las ciudades del sur del Lacio, datadas entre los siglos V y III a. C. Donde los bloques son de forma irregular, a lo que se denomina aparejo poligonal u opus siliceum.
El aparejo constructivo más usado en Roma hasta el final de la República es el opus quadratum, en el que los bloques paralelepípedos regulares uno sobre otro en hiladashorizontales (aparejo isódomo), todos a soga (visto por la cara mayor) o a tizón (vistopor la cara menor) o alternando hiladas a soga en hiladas a tizón, ya sea en una misma hiladas o en gradas distintas. Los primeros ejemplos contratados de este tipo de aparejo son los restos de la muralla del siglo IV a. C. y una parte de los basamentos del templo de Júpiter Capitolino
Figura 4. Opera quadrata. 1: Templo de Júpiter Capitolino. 2: Muralla “serviana” del |
Estructuras mixtas
El aparejo en damero es la alternancia de bloques de sillar con rellenos de mampuesto; este tipo no tiene una larga trayectoria y sólo se usa en los siglos IV y II a.C.
Otro aparejo es el opus africanum siglo IV a.C., está compuesto por cadenas verticales de bloques de sillares en alternancia con hiladas verticales y horizontales que están rellenos con mampuestos (fig.5.1).
Difundida por los cartagineses (Sicilia y Ponpeya)Finalmente, el entramado de madera denominado opus craticium.
Consta de dos pies rectos de madera que apoyan sobre los zócalos de mampostería y que sostienen una viga superior que recibe el armazón de la cubierta, además hay otras vigas menores que evitan la flexión lateral y divide los paneles en lienzos, que se rellenan de opus incertum
Pequeños aparejos
Una vez que aparece el opus caementicium, el opus quadratum se reserva para los grandes edificios. El opus caementicium se reviste con parámetros de piedras o ladrillos, dando lugar a diversos aparejos, que detallamos.
Al principio el opus caementicium (fig. 6.1) se reviste con grandes bloques pétreos creando un falso parlamento de opus cuadratum y posteriormente los ensayos encaminan a crear un tipo de construcción más ligera, el opus incertum se realiza con pequeños bloques de tufo colocados de forma irregular en las dos caras del muro.
muralla de Ponpeya con supersposición de aparejos: opus cuadratum, opus reticulatum y opus testacerum |
El opus vittatum es un aparejo isódomo de reducidas dimensiones y dispuesto en piedras cuadrangulares en hileras horizontales (fig.6.3).
El opus mixtum (fig. 7.1) son los parámetros construidos con alternancia de mampuestos y ladrillos, donde estos últimos serán con los que se hagan los ángulos de los muros y la parte inferior como superior del muro.
El primer edificio construido íntegramente con ladrillos es decir el denominado opus testaceum son los Castra Praetoria, datada entre el 21 y el 23 a.C. (fig.7.2). En el aparejo denominado opus listatum alternan ladrillos con otros de pequeñas piedras de tufo rectangulares (fig. 7.3).Arcos, bóvedas y cubiertas
Los arcos pueden construir con distintos tipos de aparejos. El gran aparejo puede consistir en un gran bloque que flanquea la distancia entre dos soportes y cuya cara interior está tallada de forma curva; también pueden ser dos bloques que dan lugar a una estructura triangular y varios bloques unidos por aproximación de hiladas. El arco de dovelas son piezas pétreas en forma de cuña que se colocan de forma radial. En ocasiones en que se construyen con la misma estructura mixta de los muros, pero de manera que el ladrillo o la piedra está en la cara vista, mientras el interior se recubre con opus caementicium.
Bajo el término de bóveda se debe entender cualquier estructura de cubierta cuya principal característica es la concavidad de la superficie interna y el empuje lateral de los elementos que la constituyen. La disposición y los tipos derivan de la planta del espacio a cubrir (de cañón para estancias rectangulares, de cúpula en las circulares, esquifada en las cuadradas…)
Dependiendo de su construcción hay dos tipos:
- la bóveda de dovelas que se hace con bloques pétreos de diferentes tamaños y la bóveda concrecionada, para cuya construcción es imprescindible la cimbra, que está constituida por dos arcos de círculos de madera triangulados y unidos por un tablado semicilíndrico llamado manto de cimbra, que hace de molde de la bóveda. El conjunto apoya en el suelo mediante postes o a la altura del nivel del arranque, practicando unos salientes que pueden tener valor decorativo de cornisa (fig.8).
Para construir las bóvedas concrecionadas, sobre una cimbra de madera, el albañil vertía el opus caementicium y después de quitar la cimbra se remataba el acabado del intradós mediante la aplicación de un enlucido con el que conseguir un perfil regular que permitiese la decoración pintada o estocada.
La técnica de construir cúpulas se adoptada con rapidez por los romanos, como por ejemplolas termas de Agripa (25 y 19 a.C.), y ya a partir de finales del siglo I d.C. la cúpula está ya instalada en la arquitectura romana.
Los armazones de los tejados son muy simples ya sean a una o dos vertientes. Yonsisten en vigas horizontales (cathenae) que van de un muro aguilón al otro; estas vigas soportan a los denominados cabrios que sobresalen de los muros y finalmente los listones donde van las tejas. Este tipo de cubierta es válida para pequeños espacios. Para grandes espacios se utiliza la estructura triangulada, que son, según Vitrubio, en dos grandes vigas (pares), colocadas según la inclinación de las vertientes, unidas en la parte superior y la inferior apoyada en una gran pieza horizontal (entrecinta o tirante); los dos padres reciben todas las cargas de la cubierta (fig.9).
Los materiales para el revestimiento de las cubiertas son tejas que generalmente se colocan de la misma forma: las tegulae, (piezas planas con rebordes) yuxtapuestas en sentido longitudinal y los imbrices, (tejas curvas), situados sobre las uniones. En los bordes del tejado las hiladas de imbrices terminan en un antefixus que es un imbrex cerrado en un extremo por una placa decorada.
Los techos interiores estaban construidos mediante un armazón de vigas de maderaque apoyan en voladizos o en huecos realizados a tal efecto en los muros; sobre estas se clavan piezas de madera más pequeñas y que forradas de carrizo se extendía el enlucido. Este sistema permite crear falsas bóvedas ya que vigas y permisos podían doblarse según el perfil deseado (fig.10).
ARQUITECTURA RELIGIOSA
Lugares y estructuras de culto en época romana
En los tiempos más antiguos se consideraba lugar sagrado aquellos espacios donde se sentía la presencia de alguna divinidad. Muchos de estos lugares podían permanecer originales o construirse estructuras (ara, edículo o templo).
El altar o (ara) fue el más simple y antiguo elemento de culto empleado por los romanos. Su función principal fue la de recibir las ofrendas realizadas a la divinidad, ya fuera en forma de libación2, con productos agrícolas o bebidas, ya en forma de sacrificios cruentos con la inmolación de un animal. Podían erigirse tanto en un lugar al aire libre, como en las ciudades, los edificios para espectáculos, las propias viviendas privadas y también unidos a los templos.
Su apariencia inicial recuerda a los templos griegos in antis, consistente en una planta en forma de “U”, con una estructura rectangular y dos antas avanzadas que rodeaban el espacio destinado al sacrificio (fig.11.1).
Durante el periodo republicano de imperial el altar sería un bloque prismático de unos 50 ó 100 cm de altura. Solía presentar un zócalo liso, seguido de unas molduras, luego el cuerpo y rematado con más molduras y un coronamiento liso o con volutas a los lados (pulvini) (fig.11.2).
Los edículos (aedicula) eran pequeños edificios que reproducían la fachada de un templo y albergaban imágenes de dioses o héroes (fig. 12.1). Eran similares a capillas o templetes (sacellum) y solían estar en el cruce de calles; también los lararios están destinados al culto doméstico muestran una estructura similar (fig.12.2), si bien su tipología presenta múltiples variantes.
1. edículo del Santuario de Juturna. 2 Lario en la Casa de Meandro en Pompeya |
Tipología y características generales del templo romano
La fórmula arquitectónica del templo romano es el reflejo de unas concepciones más cercana a la etrusca queda griega. Un elemento fundamental es el podio (basamento elevado con un único acceso escalonado en la parte delantera y donde se erguía el edificio o templo), separar al dios del hombre. Siempre se construyó en piedra y se decoraba con molduras en las partes inferiores y superiores.
El tipo más difundido era el templo próstilo, que se caracteriza por una habitación rectangular precedida de un pequeño pórtico soportado por dos pilares in antis o con una pronaos columnada (fig.13.a).
Otra modalidad fue la “etrusco-itálica” entre los siglos VI y V a.C., características de los Capitolia de las colonias romanas y de numerosas ciudades del imperio,caracterizada por ser rectangular y sin escalinata con una pronaos columnada(templo de Júpiter Capitolino de Roma) (fig.13.b).
El tipo de templo perípteros sine postico, creación romana que adopta la del mundo griego la forma alargada; es una modalidad de planta períptera pero sin columnas en la fachada posterior, tiene un gran podio y escalinata (fig. 13.c). Este modelo se difundió en el área latina y etrusca entre fines del siglo IV e inicios del I a.C.
A partir de mediados del siglo II a.C. hay un proceso helenizador y se adopta la forma pseudoperíptera en la que sobre las paredes de un templo próstilo se colocan semicolumnas (fig. 13.d).
Este influjo también trajo consigo la construcción períptera (fig.13.e) y edificios circulares de tipo tholos(fig. 13.f); además hay un alargamiento de la planta cuadrada (influencia griega) y la reducción del espacio de los intercolumnios
Referente a los materiales empleados, en los primeros tiempos sólo se utilizó la piedra en cimientos y parcialmente en el podio; las paredes de la cella eran de adobe y las columnas primero fueron de madera y después de tufo volcánico, el arquitrabe y la estructura de la cubierta también eran de madera. Entre los siglos VII y VI a.C. estos dos últimos elementos fueron revestidos de terracota. A partir del siglo V a.C. se construye el edificio en piedra y el aparejo empleado es el opus quadratum. El mármol se utilizó por primera vez en un templo a mediados del siglo II a.C., pero no se convertirá en habitual hasta la época altoimperial. Un gran avance fue la aplicación del opus caementicium, aunque reservado para los cimientos ya se utiliza en el podio, bóvedas y cúpulas.
Los recursos ornamentales de los edificios romanos se limitaban a terracotas arquitectónicas, sistema decorativo heredado de los etruscos, que disminuyen en el siglo II a.C. a causa del contacto con el mundo griego. Esta relación supuso, además, la incorporación de los órdenes arquitectónicos griegos a los edificios construidos en piedra. El orden dórico está poco representado y su versión romana es el orden toscano, se diferenciaba de la griega por el menor tamaño de capitel, que poseía un perfil de molduración más compleja y por un fuste más esbelto, sin estrías y con la base moldurada (fig. 14.1). El orden jónico tampoco estuvo muy representado; el más representativo fue el corintio por su mayor capacidad decorativa. También se creó un orden específico denominado capitel compuesto y que tenía las volutas jónicas y hojas de acanto del orden corintio (fig. 14.2).
El surgimiento de la tipología arquitectónica de las iglesias cristianas
Los escasos recursos económicos de la comunidad cristiana y su ideología explican la ausencia de grandes edificios para el culto. Por motivos de costumbres hebreas, no fue necesario este tipo de edificación; inicialmente se reunían en espacios ya edificados que adaptaban previamente para realizar las ceremonias, se denominaban domus ecclesiae y no se diferenciaban externamente del resto de casas del vecindario (Dura Europos, Siria) (fig.22).
El reconocimiento de la religión cristiana por Constantino en el año 313 d.C. ya permite la construcción de la primera basílica en Roma (San Juan de Letrán) (fig.23.1). El término "basílica" designaba en la arquitectura civil romana a las salas de reunión comercial y administración de justicia, con las que no deben en modo alguno confundirse. Los arquitectos de la época de Constantino adoptaron la arquitectura romana y la adaptaron al culto cristiano.
Siglo IV tipología, las plantas eran rectangulares y se dividía longitudinalmente en varias naves, donde la central acogía a los fieles y separaba a los catecúmenos en las naves laterales, además tenía un ábside en el remate de la nave central donde estaba el clero, existía además una nave transversal, un vestíbulo –nártex- y un atrio porticado.
También como construcción cristiana es el edificio para la veneración de los mártires y los difuntos. Durante el reinado de Constantino se construyeron basílicas cementeriales, que eran cementerios cubiertos donde se celebraban los banquetes fúnebres con motivos del diesnatalis. Estaban situados en las cercanías de las catacumbas y presenta una planta con una nave central absidiada, rodeado de un pasillo que gira alrededor del ábside.
EDIFICIOS CON FUNCIÓN POLÍTICA, ADMINISTRATIVA Y COMERCIAL
En todas las ciudades romanas en los espacios de uso público que albergaron una serie de edificios destinados a satisfacer las necesidades derivadas del orden político y ciudadano establecido por Roma, entre ellos se encuentran el comitium y la Regia, a los que se unirán después otros, adaptados a la nueva condición política y económica del Estado romano, como la curia con las basílicas.
El foro y los edificios para la administración y la reunión
El foro es un conjunto de construcciones distribuidas alrededor de una plaza. En las ciudades de fundación ex novo solía estar en el centro de la ciudad, donde se producía el cruce del kardo y el decumanus maximus. Un foro está constituido por una plaza rectangular porticada, y en uno de los lados cortos está dominada por un templo y en el opuesto está limitada por el edificio para la administración de justicia (basílica). En el espacio restante se sitúan edificios como el gobierno municipal (curia), dependencias comerciales (tabernae), la cárcel (carcer), el archivo (tabularium) o el tesoro público (aerarium).
- El templo: elemento indispensable en la definición monumental y funcional del foro, al menos durante el periodo republicano, etapa en la que el templo forense solía estar dedicado a la triada Capitolina y generaba un referente axial en la plaza. Con el reinado de Augusto se introduce el culto al emperador, que se reflejó en la construcción de edificios de culto imperial (aedes Augusti).
- El comitium (comicio) era el espacio destinado a albergar la Asamblea de Ciudadanos o para la celebración de comicios electorales. Consiste en un graderío de forma circular inscrito en un espacio rectangular.
- La curia era el edificio destinado a constituir la sede oficial del Senado o de los magistrados locales cuando se trataba de ciudades de estatuto colonial o municipal. Son construcciones rectangulares, sin columnas. En algunas de estas construcciones el lado opuesto a la entrada tenía un ábside o nicho rectangular. En sus lados largos solía disponerse los bancos para los miembros del Senado o del gobierno municipal, y en la cabecera había un estrado sobreelevado sobre el pavimento de la sala al que accedía el orador (Fig. 24).
- La basílica forensis (basílica) era el edificio de la administración de justicia, también se realizaban negocios y transacciones económicas. Tiene el esquema de grandes salas de planta rectangular divididas en varias naves longitudinales por hileras de columnas, que sujetaban una cubierta plana o abovedada de madera. Muchas de ellas presentaban una fachada principal porticada. Yra frecuente que hubiera otro piso sobre las naves laterales, siendo la central más ancha y de mayor altura. La planta podía completarse con un ábside, en uno de los lados cortos, donde estaban los escaños de los magistrados (tribunal) o, incluso, con doble remate absidiado como sucede en la Basílica Ulpia (fig. 25).
- Los pórticos. Normalmente e aplica este término a todo edificio más largo que ancho, abierto en toda su longitud con una columnata. El muro del fondo solía ser liso o tener ventanas, la zona cubierta podía ser diáfana o estar dividida en dos o tres naves mediante una o dos hileras de columnas
EDIFICIOS PARA ESPECTÁCULOS Y OCIO
Significado y función del ocio en la sociedad romana
La sociedad romana simpatía con cierto desprecio por el trabajo manual que comportaba la percepción de un salario y es en este ambiente, en el que se potencia la vida ociosa como sinónimo de clase social, donde encuentra su lugar la práctica de ciertas a actividades que comportaba la diversión o el cultivo del cuerpo. Pero junto a esta vida ociosa de las elites de Roma también se generaba el ocio para las clases bajas (como método de control y manipulación). El tiempo de ocio se ofertaba como espectáculos, los más importantes datan del siglo IV a.C. y eran en honor de Júpiter (Ludi Romani), también los Juegos Plebeyos, celebrados en honor a Júpiter (Ludi Plebeii), programados anualmente desde el siglo III a.C., también había otras celebraciones en honor a otras divinidades del panteón romano. Junto a estos juegos programados en su calendario se podían programar otros extraordinarios para celebrar la inauguración de edificios, victoria, aniversario del emperador, etc.…
Cada forma de espectáculo contó con un tipo de estructura construida ad hoc. De este modo:
- Las representaciones escénicas – ludi scaenici- (teatro).
- Los combates gladiatorios –munera-. (Anfiteatro)
- Las luchas o cacerías de fieras salvajes – venationes-. (Anfiteatro)
- los combates navales –naumachiae- . (Se celebraron en los anfiteatros).
- Las carreras de carros. (en los circos).
- Las competiciones y juegos atléticos –certamine graeca o agones- (estadio)
Los teatros
Las representaciones teatrales formaban parte de los juegos públicos celebrados en honor de los dioses, por lo que no deben ser considerados en exclusiva como un fenómeno lúdico sino como una expresión de la vida cívico-religiosa.
Hasta finales de la República no había en Roma ningún teatro estable en piedra; erigido por Pompeyo en el Campo Marcio en el año 55 a.C. se trataba de un edificio exento concebido de modo que la cávea era la estructura de acceso al Templo de Venus, también construido por él mismo (fig.31.1).
Al teatro de Pompeyo le siguió el que Augusto dedicó a su nieto Marcelo y que ya constaban con todos los elementos propios del teatro; en la actualidad se conservan dos de los tres pisos con columnas dóricas, jónicas y podría haber albergado a unos 15.000 espectadores (fig.31.2).
Las normas de construcción de los teatros vienen expuestas en el libro V del tratado de Arquitectura de Vitrubio. La planta canónica de estos edificios poseía las siguientes partes
- La Cávea: Graderío de planta semicircular dividido en tres partes de altura creciente (ima, media y summa cavea) donde debían colocarse los espectadores por su rango. En los asientos inferiores se situaba la aristocracia, con lugares privilegiados para los miembros del Senado y sobre ellos pertenecientes al orden ecuestre (equites). En la media cávea tomaba ciento el grueso de la plebe, las mujeres debían ver el espectáculo desde la summa cávea (a excepción de las clases social altas) y en la zona más alta estaban las clases sociales más humildes y sobre ellos, la zona más alta, los esclavos.
Toda la cávea estaba dividida en sectorestriangulares –cunei- para facilitar el movimiento de las personas, además tenía escaleras y corredores radiales.
- Balteus: murete de separación entre la orchestra y el graderío.
- Orchestra: de forma semicircular, a diferencia de la griega que era circular, era el lugar reservado a los asientos de los altos magistrados.
- Pulpitum: se trata propiamente del escenario. Su frente estaba articulado en nichos y decorado con relieves. Bajo el pulpitum se hallaba el telón (aulaeum).
- Scaena frons. Se trata la fachada monumental que sirve de fondo al escenario. Normalmente está formada por una estructura de dos o tres pisos cubierta por un tejadillo que facilitaba la resonancia. Estaba muy decorada y tenía tres puertas por donde entraban y salían los actores.
- Versurae: es una estancia que estaba entre los dos extremos el hemiciclo y el cuerpo escénico; su función al no aparecer en el tratado de Vitrubio no está muy clara y podría tratarse de un lugar para los espectadores más egregios (ilustres).
- Post scaenam: situado detrás de la fachada (scaena frons) sería un pórtico para albergar a los espectadores en caso de lluvia y donde estarían los locales para los actores…
Algunos teatros podían tener una cubierta móvil de lino o seda para proteger el espectáculo (velum).
Los odeones
Destinado a las audiciones musicales y recitales; se piensa que era un teatro pequeño cubierto con la particularidad de obtener la mejor condición acústica
Los anfiteatros
Debían ser construcciones de gran capacidad, con buena visibilidad y un escenario muy versátil para todo tipo de espectáculos. Al no tener referentes griegos en este tipo de construcciones, los romanos crearon a partir del siglo I a.C. una original estructura de planta elíptica impuesta por su núcleo escénico al que llamaron –arena-.
El graderío –cavea- solía estar dividido por tres muretes –baltei- en cuatro secciones superpuestas, y la última de ellas estaba dividida a su vez en dos. La sección inferior –podiumeran dos gradas que llegaban hasta la arena pero separadas por un murete de mármol (este material evitaba que las fieras salvajes se agarraran). Este espacio estaba reservado a senadores vestales, altos magistrados. A continuación había una zona para los miembros del orden ecuestres, y sobre ellos los tribunos y después los ciudadanos. En las zonas más altas estaban destinadas por orden los ciudadanos desprovistos de derechos de ciudadanía y las mujeres plebeyas, todo este grupo estaban de pie en las gradas.
Para el rápido desalojo en caso de necesidad había un sistema de comunicación horizontal con pasadizos que rodeaban la arena a diversas alturas y en sentido vertical, con escaleras que dividen el graderío en varias secciones –cunei-.
La característica más destacada de estas construcciones republicanas era la búsqueda topográfica apta para el asiento de la cávea. Sólo en el caso de que las condiciones naturalesno fueran las idóneas se utilizaban elementos de sostén para las gradas.
El mejor anfiteatro conservado es el de Pompeya, que se remonta a la época de Sila. La obra se apoya en parte en el terreno y en parte en una estructura de arcadas y contrafuertes. La arenapresenta una forma bastante alargada y contaba con dos accesos principales abiertos en el eje mayor, provistos con escaleras de fuerte desnivel (fig.33).
La evolución técnica de estos edificios tiene como punto de partida la cávea tallada en la roca; seguiría después una obra mixta que combina la cávea tallada con hormigón macizo. Se trataba de acumular tierra para asentar postes para el sostén de bancos de madera o bien dar forma a estos taludes, cubriéndolos de hormigón un armazón de madera y colocar encima la grada de piedras o estuco. Pero este sistema no soportaba bien la lluvia, por lo que se impuso seguidamente la estructura maciza, donde el graderío estaba construido sobre estructuras compuestas por muros rellenos de tierra.
El primer anfiteatro estable de Roma fue construido en la zona sur del Campo Marcio por Statilio Tauro en tiempos de Augusto. Tras una serie de modificaciones y adecuaciones de Calígula y Nerón, Roma tuvo su anfiteatro digno de la capital del mundo en época flavia. Su ubicación en el centro de la ciudad, en el espacio que ocupaba la Domus Aurea de Nerón, y su enorme tamaño supusieron la culminación de la demagogia política desarrollada por la nueva dinastía, (los flavios).
En la antigüedad era conocido como Anfiteatro Flavio (fig.34); el nombre “Coliseo”, comenzó a emplearse en la Alta Edad Media a causa de la proximidad del edificio al “Coloso” de Nerón. El proyecto fue iniciado por Vespasiano (71-72 d.C.) e inaugurado por Tito (80 d.C.), aunque los trabajos finales son de Domiciano. Se trata del anfiteatro más grande del mundo. Sus ejes miden 188 x 156 m. y tenía una altura de 55 m. Las partes externas y principales estructura eran de travertino con opus quadratum. Las estructuras portantes secundarias eran de opus caementicium revestido de ladrillos. Los cimientos eran de hormigón sobre el que apoyaban pilastras de travertino enterradas a gran profundidad. El anillo de la fachada, tambiénconstruido en travertino, estaba formado por tres órdenes superpuestos, encuadrados en semicolumnas de orden toscano, jónico y corintio en sentido ascendente. La fachada estaba coronada con un ático abierto con ventanas rectangulares. El graderío estaba dividido en cinco sectores para las diferentes categorías sociales.
La arena también fue objeto de importantes acondicionamientos, con un corredor anular de servicio de 2 m. de anchura con las paredes perforadas por nichos de los que se desconoce su función. El subsuelo -fossa bestiaria- ocultaba toda la infraestructura precisa para albergar lasjaulas de los animales y los montacargas y contrapesos que permitían la subida a la arenatanto de las bestias como de escenario impresionantes.
Por último, hemos de referimos al sistema de cubierta móvil que protegía del sol a los asistentes. El dispositivo desplegaba una inmensa carpa –vellum- que cubría el anfiteatro.
Los circos
En los momentos más antiguos de los juegos ludi circenses se celebraban al aire libre aprovechando la morfología del terreno, para que los espectadores pudieran seguir la evolución de los aurigas. Posteriormente se realizó algún acondicionamiento (como gradas móviles).
La formulación arquitectónica clásica no tuvo lugar hasta el año 174 a.C. de la que son las primeras estructuras estables del Circo Máximo de Roma (fig. 35).
Desde su inicio, presenta una planta rectangular con un lado semicircular. En el lado recto estaban las carceres, (boxes) donde los carros esperaban la salida. El edificio constaba de una pista de tierra batida, dividida en su eje longitudinal por un muro de baja altura –spina- que tenía función decorativa (obeliscos, estatuas, fuentes...). En los extremos de esta spina se colocaban las bases semicirculares –metae- unas bases semicirculares en torno a las cuales giraban los carros en las carreras. En los lados largos de la pista y el hemiciclo opuesto a las carceres se ubicaba la cavea con gradas divididas por corredores que llevaban a las escalares de acceso.
Los estadios
El término “estadio” deriva una unidad de medida griega equivalente a 600 pies, unos 180 m.En su forma griega más antigua se trató de un rectángulo de 6 veces su anchura, aunque tiene parecido con el circo sus funciones son distintas, también sus dimensiones y su estructura interna. Desde el punto de vista constructivo consta de una pista de tierra batida con el lado de partida rectilíneo y el opuesto curvilíneo, rodeada de un graderío.
En Roma el primer estadio que se construyó por iniciativa de Domiciano en el Campo Marcio (Piazza Navona) (fig. 36).
Sabemos que la fachada externa estaba constituida en el primer piso por arcadas apoyadas sobre pilastras de travertino encuadradas por semicolumnas jónicas. Un segundo piso de orden corintio se correspondería con la media cavea.
Termas. Los edificios termales como organismos arquitectónicos. Partes integrantes y funcionamiento.
Si en las etapas más antiguas las salas de baño se calentaban con braseros hasta la aparición del hypocaustum. En el ámbito Itálico las instalaciones más antiguas de calefacción sobre hipocausto se encuentran en las Termas de Stabia de Ponpeya y se datan del año 90-80 a.C.
El sistema de hypocausto permite la circulación del aire caliente bajo el pavimento y entre las paredes de la estancia, lo que evita el problema de los humos y gases de la combustión (fig.37). El procedimiento es como sigue: el calor se originaba en un hogar –praefurnium- que estaba generalmente en un sótano o una zona de servicio abierta. Este hogar contaba con una abertura en arco en la pared del hipocausto por la que se metía el combustible y tenía un cenicero hacia el que se extraían los restos de la combustión para su limpieza. En las grandes termas estas dependencias estaban en las partes traseras del edificio.
El calor originado en el hogar se difundía a través del espacio hueco creado bajo el pavimento.
Este pavimento –suspensura- podía apoyar sobre unas pilastras de ladrillos cuadrados o redondos –pilae- (fig. 38.2) o sobre un sistema de arcos de ladrillos o con muretes.
Con el fin de evacuar los gases y humos y, optimizar el calor, se realizaron dobles paredes, creando una cámara de aire entre el muro portante y el paramento del interior de la estancia.
Para garantizar la sujeción de ambas y la circulación del aire se emplearon varios sistemas.
- Uno de ellos consistía en emplear unas tejas planas con protuberancias -tegulae mammatae, (tejas de tetilla)- que separaban las dos paredes en toda la superficie, pero este sistema resultaba poco estable.
- Otro sistema se ideó durante el siglo I d.C. que consistía en una canalización hecha en pequeñas piezas cerámicas huecas con forma de prismática que se insertaban unas con otras (tubuli), y se fijaban a la pared maestra con una capa de mortero o con grapas metálicas. Después se revocaban y sobre esta superficie se procedía a ejecutar la decoración o el revestimiento final (fig.38.1).
Los edificios termales presentan un modelo-tipo de diferentes características y funciones,adaptadas a la alternancia de baños de agua fría y caliente y al paso por estancias de temperatura tibia:
- Apodyterium. Esta estancia es la primera del recorrido termal y está precedida de un vestíbulo. Se trata del vestuario donde dejar los objetos personales. Solían contar con unos bancos corridos adosados a la pared y nichos en los muros. Esta habitación no estaba calefactada pero podía tener un brasero (fig.39).
- Tepidarium. Se trataba de un ambiente de temperatura tibia situado generalmente ente las salas calientes y frías. En algunos casos podía contar con una bañera o pila con agua templada.
- Caldarium. Era la estancia destinada al baño caliente. Podía disponer de bañeras fijas -alvei-, que estaban metidas en salas o en un ábside, revestidas con mármol y con algún escalón a modo de asiento. La habitación mantenía el calor mediante un hipocausto y el agua del alveus entraba cliente desde una caldera por medio de fístulas de plomo.
- Sudatio. Se trata de una estancia con funciones de sauna. Suele presentar forma circular, a veces con nichos o ábsides provistos de bancos par el asiento y cubierta cupuliforme o troncocónica. En las etapas más antiguas había estufas metálicas para sobrecalentar el aire y favorecer la sudoración. Después estas salas contaban con su propio hipocausto. En el centro podía haber un labrum de agua hirviendo.
- Frigidarium. Se trataba del ambiente reservado a los baños fríos. La forma de esta estancia podía tener forma circular con nichos o bancos. En su interior solía hallarse una o más piletas de agua fría de forma variada, empleadas para el baño por inmersión. En los grandes conjuntos imperiales el frigidarium se complementaba con una piscina para nadar –natatioLos grandes conjuntos termales también contaban con otras estancias complementarias al baño, como:
- La palestra (patio al aire libre rodeado de pórticos) para realizar ejercicios físicos.
- El unctorium. Salas de aplicación de aceites corporales y masajes.
- El destrictarium. Sala para la limpieza y retirada de ungüentos, aceites, lodos corporales tras los ejercicios gimnásticos.
- Los servicios higiénicos se completaban con latrina (retretes) que eran espacios rectangulares con asientos en muros perimetrales y debajo de los cuales discurre un canal por el que continuamente pasa agua corriente, que es conducida a través de un colector a la cloaca más próxima.
Uno de los recorridos más habituales se iniciaba en el apodyterium desde donde se hacía un circuito que pasaba por el tepidarium, caldarium, tepidarium otra vez y frigidarium. Otro recorrido frecuente: tepidarium, laconicum, caldarium y frigidarium.
ARQUITECTURA DOMÉSTICA
Tradicionalmente las estructuras de hábitat del mundo romano se han clasificado en cuatro grupos fundamentalmente:
- La domus, consideradas casas unifamiliares, propiedad de familias solventes.
- Las insulae que, en su acepción más general, se identifican con residencias plurifamiliares de varios pisos de alquiler denominados cenacula. También designa una casa grande a cuyos pisos superiores se accede por escaleras desde la calle y que está compuestas por viviendas independientes.
- Las villae, grandes residencias urbanas o rústicas, habitadas por familias acomodadas.
- El palatium que es la residencia del emperador.
- Domus
Primeramente haremos un análisis general de la disposición y características de las estancias y para eso recurriremos a la zona del Vesubio donde los restos cubiertos por los materiales volcánicos de la erupción del año 79 d.C., permiten un conocimiento detallado (fig. 44).
El umbral de entrada era una especie de vestíbulo, cuyo espacio no era suficiente para disponer los bancos de espera de los clientes, por lo que estos se situaban a lo largo de la fachada.
Un corredor denominado fauces enlazaba la entrada con el atrio, que organiza toda la domus y cuya cubierta tiene una abertura central (compluvium) y cuando ésta se sitúa en el centro de las cuatro pendientes del tejado se denomina (atrium compluviatum).
El atrium que no tiene apoyos verticales se denomina tuscanicum, y en su centro hay una balseta impluvium que recoge las aguas de lluvia que caen por los compluvium. En ocasiones el impluvium está rodeado de cuatro columnas y se denomina tetrástilo; con seis o más columnas se conoce como atrio corintio (siglo II a.C.). Según Vitrubio existe otro tipo, llamado displuviatum, con tejado en forma troncopiramidal que presenta las vertientes hacia el exterior.
En algunas ocasiones podía haber un vellum que cubría el compluvium, o una reja para tapar el orificio, evitando la entrada de intrusos en los atrios.
En los atrios se exhibían las imagines maiorum, retratos de antepasados, y era donde se recibía a los clientes en la ceremonia matinal de salutación. En el eje con la puerta había una mesa de mármol denominada cartibulum, donde se exponían los objetos de más valor de la vajilla
Otra estancia es el tablinum, especie de archivo anexo del atrio y situado frente a la puerta de entrada. Su nombre deriva de tabulae, tablillas de madera que era donde guardaban los archivos de las actividades públicas y transacciones comerciales de la familia.
Las alae, abiertas al atrio, están a ambos lados de éste, pero no se conoce su funcionalidadexacta.
En otra de las estancias está colocado el triclinium, que es un lecho de tres plazas para comer.
En algunas domus pueden ser muy numerosos y se colocan de diversas maneras dependiendo la estación y época del año. Estas estancias están destinadas a las cenas, donde los invitados se colocan en los klynai que forman una U en torno a la mesa central siguiendo un orden preestablecido, así el lectus imus, a la izquierda, se destinaba al dominus, su esposa, hijo o liberto; el lectus medius se reserva para los invitados de alto rango y el lectus summus, a la derecha, para el resto de los invitados (fig. 46.1). En el caso de que la estancia tenga sólo dos lechos se disponen en ángulo recto y se denomina biclinium. Si el clima del lugar es apropiado los triclinios se colocan en el peristilo y están cubiertos con una pérgola.
Otra estancia de la domus es el oecus, es un salón de reuniones que también servía como comedor.
Los dormitorios se denominan cubiculasuelen ser de tamaño reducido, se reconocen fácilmente por el hueco de la pared donde se encaja al lecho (fig. 46.2).
En el siglo II a.C. y por influencia helénica se introduce en las casas romanas el peristilo, que es un jardín rodeado de columnas y cerrado por un muro al exterior, está decorado con fuentes, vegetación, estanques y decoración que lo convierten en un lugar de recreo en el interior de las casas.
En las casas primitivas el hogar se situaba en el atrio pero con el paso del tiempo aparece una estancia destinada al hogar (culina), es de pequeñas dimensiones y tiene una encimera donde disponían las brasas para cocinar. Juntoa la cocina estaba la letrina.
Los baños en las domus se remontan a finales del siglo III a.C. y en un principio estos primitivos balnea responden a necesidades de tipo higiénico y se situaban en el mismo espacio que las cocinas. En el transcurso del siglo II a.C. la cocina y el balneum se diferencian, en el baño aparecen braseros para calentar las estancias, entre las que ya se identifican el apodyterium/tepidarium y el caldarium. Y hacia el año 100 a.C. hace su aparición el hipocaustum, calentando un mayor número de salas y, constituyendo auténticos balnearios en el interior de las casas.
Una breve referencia a las estancias subterráneas, que podían tener dos formas distintas,cryptoporticus son largas galerías bajo los peristilos, anexo del hábitat y las bodegas destinadas a almacenar alimento y comida.
- La evolución
Durante los últimos años se ha excavado bajo algunos atrios pompeyanos descubriendo patios abiertos y sin trazo alguno de impluvia, sino unas canalizaciones diagonales que recogían las aguas rompiéndose así la oposición entre la casa romana con atrio y la griega con patio.
Las casas más antiguas de Pompeya tienen una planimetría atrium-tablinum; al atravesar las fauces se accede al atrio toscano con estancias y tablinum tras el que se sitúa el hortus y los triclinia (fig. 47.1).
Desde los inicios del siglo II a.C. se introduce el peristilo que se sitúa detrás del atrio, este peristilo puede duplicarse de tamaño y constituir el nuevo centro de la casa por lo que se construyen los triclinios a su alrededor (fig. 47.2). A finales del siglo II a.C. el peristilo ya está incorporado a las casas aristocráticas.
Los acontecimientos políticos del siglo I a.C. modifican las casas pero se continúa con la evolución de la domus y sus peristilos, además de nuevas salas para el descanso como zonas termales, lo que conlleva la pérdida de representación del atrio
La gran aportación del siglo I a.C. a la arquitectura doméstica es la aparición de los oeci en las casas de los nobles, son salones de tipo triclinar con columnas que le dan un aspecto más lujoso. Los testimonios arqueológicos que avalan esta presencia, proceden de Pompeya donde los hay corintios y tetrástilos. Otro tipo de oecus citado por Vitrubio es el aegyptius, en el que sobre las columnas hay un arquitrabe que se une con vigas a los muros y permite la colocación de un suelo que se convierte en un paseo. Sobre los arquitrabes se levanta un segundo orden de columnas más pequeñas que sostienen un techo de casetones.
Otra de las características de las casas nobles a finales de la república es la presencia de baños y ya a finales del siglo I a.C. los balnea privados se han desarrollado considerablemente.
Durante el siglo I d.C. no hay grandes cambios en las plantas, pero si una modificación en la concepción general. Siguiendo la tendencia de finales de la República, el atrium pierde importancia y aumenta la de los peristilos, que se enriquecen y embellecen con fuentes, lagos, cuyos juegos acuáticos se observan desde los oeci o los triclinia que se abren a esta zona.
La ciudad de Ostia es el mejor lugar para conocer los progresos de la domus en el siglo II d.C. Afinales del I y durante todo el II d.C. la planta característica es la casa de peristilo donde las estancias que rodean este espacio columnado que sustituye al atrio (fig.47.3).
La tradicional domus de época alto y medio imperial sufre unas transformaciones a lo largo delos siglos III y IV. Aparece una estancia de representación con ábside que se destina abanquetes, reuniones, etc., con una lujosa decoración. El peristilo se sustituye por un espacio abierto que puede o no estar rodeado de columnas y en cuyo centro se sitúa una fuente monumental. Aparecen las plantas circulares o poligonales, con cúpulas; otro aspecto es la luminosidad gracias a más ventanas y aberturas.
- Las casas de las clases medias y humildes.
Nos basaremos en los restos de Pompeya y Herculano. En el siglo II a.C. las casas con atrio carecen de estancias a los lados y algunas podían tener un piso donde vivía la familia. Otras casas estaban estructuradas en torno a un espacio transversal al corredor (fauces) y presentanun jardín o huerto (hortus) para la subsistencia familiar.
Otras fórmulas de hábitat mucho más humilde son las pergolae, que son los entresuelos situados sobre las tiendas y que alojaban a esclavos y libertos que llevaban el negocio.
En Ostia había un tipo de casas destinadas a las clases medias y bajas denominada “CasetteTipo” y que son edificios construidos en serie que constaban de una planta baja y un entresuelo.
- Las insulae
El término insulae hace referencia al grupo de edificios delimitados por vías, y que se considera una propiedad inmobiliaria articulada en pisos. Ya debemos hacer la diferenciación entre el inmueble colectivo y la casa gentilicia o domus familiar.
El hábitat de varios pisos considerado tradicionalmente imperial, debe reconocerse ya a finales del siglo III a.C. y responde a la necesidad de la superpoblación de la ciudad como refugio a las clases más humildes.
Durante el siglo I d.C. ya hay constancia de casas de varios pisos en las ciudades vesubianas, entre las que destacan la “Insula Orientalis II” de Herculano, que tiene una planta bajaocupada con tiendas y talleres artesanos y los tres o quizás cuatro niveles superiores.
Las insulae de Ostia, al igual que en Roma, sólo permitían el desarrollo parcial de la vida cotidiana, sólo servían para dormir ya que no estaban preparadas con el resto de servicios necesario, a los que la gente debía acudir a la ciudad.
La clasificación de las casas de Ostia se hace en dos tipos (fig. 48), de tipo I (la planta baja está ocupada por tiendas, con tabernae abierta al patio y no a la calle; el entresuelo servía de alojamiento a los artesanos y los pisos altos estaban divididos en apartamentos a los que se accedía por una escalera situada en el patio fig. 48.1).
El tipo II (la planta baja está ocupada por viviendas). Una primera serie tiene la planta den forma de L que se abre a un jardín (fig. 48.2). La segunda serie son los edificios denominados de planta basilical ya que las estancias se distribuyen a ambos lados de un pasillo longitudinal
ESTABLECIMIENTOS COMERCIALES, DE ALOJAMIENTO Y RESTAURACIÓN.
Las tiendas tabernae, presentan una serie de características comunes. Es una única estancia, con una gran abertura a la calle que podía tener una trastienda o una estancia en el piso superior se alojaba el propietario.
La mercancía se exponía al público en la zona delantera sobre un mostrador, excepto en la zona de acceso que estaba tapada con un biombo o mampara de madera, y se encastraba al suelo o en una ranura tallada en el umbral. Estas características son comunes, por lo que no podemos diferenciar los tipos de negocio.
En relación a los hoteles, bares o restaurantes hay una división en dos grupos:
- Hoteles u otros establecimientos de alojamiento, a los que se añade comida y bebida:
- Hospitium: con múltiples comedores, triclinia de verano, cocinas, dormitorios.
- Stabulum: hay un pasaje abierto pavimentado con grandes losas y alrededor de un patio hay comedores, letrinas, cocinas; generalmente hay una taberna conectada a este establecimiento.
- Caupona. era el nombre de un alojamiento para viajeros. También se utilizaba este término para referirse a tiendas donde se servía vino y comida ya lista para servir o a lugares de entretenimiento.
- Locales en los que se sirve comida y bebida:
- taberna, no existe cocina, sólo un pequeño hornillo, y lo más característico es el mostrador con los dolia (recipientes muy porosos para almacenar líquidos o alimentos sólidos) encastrados, para guardar el vino se usan las ánforas;.
- Popina. En las popinae deben existir estructuras que respondan a la necesidad de comida y bebida con un mostrador.
Lo más característico es el mostrador con los dolia encastrados, al que se añade un dispositivo en forma de escalera de obra o de madera para colocar los recipientes.
Los dolia, recipientes muy porosos para almacenar líquidos, debieron contener alimentos sólidos. Para guardar el vino se utilizan las ánforas (fig. 49).
Aunque pudieron existir cellae meretriciae, (lupanar), en algunos establecimientos hoteleros, Pompeya conserva un edificio completo destinado a la prostitución (fig.50).
INGENIERÍA Y OBRAS PÚBLICAS
Una red diaria al servicio del sistema urbano
La red viaria fue imprescindible para garantizar la romanización y pacificación en las provincias conquistadas.
- Tuvieron un rol militar sirviendo de referencia para la implantación del hábitat, desarrollo y cohesión de los núcleos urbanos.
- Influyó en la delimitación del territorio siguiendo los ejes viarios.
- Económicamente, a través de ellas se realizaban los intercambios comerciales.
- Finalmente debemos considerarlas el vehículo de difusión de ideas políticas, religiosas y artísticas.
En definitiva, puede considerarse como uno de los medios esenciales del proceso de romanización.
- Fuentes para el estudio de las vías romanas
Para el conocimiento del trazado general de las vías del imperio contamos con las fuentes escritas y las arqueológicas.
Las fuentes escritas responden a distintas épocas, así las fuentes antiguas (literarias o epigráficas), las fuentes medievales y las fuentes modernas que hacen referencia a caminos y que nos permiten rastrear la pervivencia y evolución de las vías a lo largo de la historia.
Las fuentes literarias antiguas nos detalla el recorrido y nos informan del nombre de la vía (indicando normalmente punto de partida y su destino final), las mansiones o puntos de parada en el recorrido y las millas que separan una mansión de otra. Las fuentes literarias más significativas son:
El Itinerario de Antonino, no hay unanimidad de fecha, la hipótesis más generalizada se inclina a echarlo en los años 80 del siglo III.
El Anónimo de Ravena (siglos VII), su redactor debió ser cristiano y es una recopilación de nombre geográficos o Cosmografía.
La Tabula Peutingeriana, que es una especie de mapa donde indica ciudades, pueblos, lagos, montañas, templos balnearios, mares y viñetas de fortificaciones, Carlos, puertos y mansiones (fig. 51. 1).
De las fuentes epigráficas destacaremos los Vasos de Vicarello y los miliarios. Los Vasos de Vicarello (fig. 51.2) proceden de Aquae Apollinares a 30 Km. de Roma, e informan del recorrido de Gades a Roma.
Se consideran la ofrenda de uno o varios gaditanos agradecidos por su curación en los baños o por el feliz término de su viaje.
Son cuatro los vasos encontrados, los tres primeros datarían de la época del principado, mientras que el cuarto algo posterior, de finales de Augusto o Tiberio.
Los miliarios son inscripciones en mojones con indicaciones básicas (fig. 51.3): casi siempre llevan el nombre del magistrado o del emperador bajo cuyo mandato se construye o repara la vía, es frecuente que figure la distancia en millas respecto a la mansio inmediata o respecto al origen o punto de destino de la vía, pueden figurar también los nombres de las legiones que intervienen en la construcción o reparación de la vía.
Ciertas técnicas arqueológicas, como la prospección, fotografía aérea, excavaciones…permiten localizar las vías en el terreno y sus elementos asociados (puentes, arcos de triunfo, trofeos, necrópolis…).
- Características de las vías romanas
El Imperio Romano estaba surcado de caminos, aunque hoy solamente todo podemos conocer una parte de ellos. Existen distintas categorías según su importancia y función, que podemos clasificar gracias a un documento del siglo I d.C. llamado Siculus Flaccus:
- Vías públicas (viae publicae), construidas por el estado y llamadas con el nombre del constructor.
- Vías militares (viae militares), construidas por el ejército con fines estratégicos pero que acaban desempeñando una función pública.
- Vías vecinales (actus), construidas y mantenidas por una comunidad.
- Vías privadas (viae priuatae), construidas por particulares en fincas privadas.
La construcción de una vía requiere ciertos trabajos previos, tales como allanar el suelo o excavar una amplia zanja donde ubicarla (fig. 52). Una vez realizado esto se coloca un capa de guijarros (statumen), y sobre ella se pone otra capa de guijarros, arenas y arcillas (rudus nucleus) y finalmente la capa denominada (summum dorsum o summa cresta) que es el pavimento de losas o guijarros bien colocados.
Además de este tipo de vías hay otras que no requieren preparación, las llamadas uiaeterrenae (vías de tierra).
A los lados de las calzadas se colocaban una serie de piedras para flanquearla y una zanja que recogía el agua de lluvia para evitar que las vías se inundasen. En la anchura no hay unas determinadas medidas y dependen de la importancia, naturaleza del terreno…
Se ha calculado que sólo la red principal de vías romanas debía ser de 120.000 km. y a lo largo de ellas se disponían mansiones y también otros lugares de carácter oficial, que aparecen como consecuencia de la creación por parte de Augusto de un correo oficial., el cursuspublicus. Las mansiones eran posadas y las mutationes eran lugares para cambiar de montura, con patios porticados para el acceso de carruajes, tenían abrevaderos, establos, termas, talleres, templos…pero sólo se podía acceder si tenías sello imperial o una ficha acreditativa (tesserae hospitales).
Los puentes
Los puentes constituyen las obras más espectaculares de la red de comunicaciones. Además de por su funcionalidad los puentes romanos tienen gran valor como engrandecimiento del poder de Roma gracias a las esculturas, columnas, arcos e inscripciones que completaban la obra.
Su rasgo principal es su cuidada construcción dirigida a dotarle de solidez. Es casi imposible exponer características generales en el estudio de estas obras. A pesar de ello se pueden definir algunos rasgos comunes como sus grandes arcos, la presencia de arquillos dealigeramiento y tajamares que evitan el golpe directo del agua con la base…
La cimentación se podía hace de dos maneras:
- En seco, sólo en los lugares que obviamente se podía hacer la obra a pie seco.
- Para cimentar en el agua, donde había dos maneras:
- Una de ellas era construir un encofrado de madera donde meter el hormigón con mortero de puzolana (que fragua en el agua).
- La otra manera es un encofrado de madera de doble pared rellena de sacos de arcilla para crear un lugar estanco, una vez hecho el cajón y con ayuda de maquinaria se vacía de agua (fig. 54).
Los materiales empleados son de varios tipos, además de los de piedra hechos con opus caementicium.
Los primeros modelos eran de madera(ligneos), mediante un sistema de pilotaje unido a la parte superior para construir la pasarela.
Como evolución de este tipo surge el puente mixto, con pilotaje de piedra y la estructura superior de madera.
También existen los puentes de ladrillo (latericios) pero el ladrillo resiste bastante peor que la piedra las crecidas de agua.
Obras hidráulicas
La captación de las aguas
Cuando no existían acueductos el uso de cisternas, fuentes o pozos era lo más común. Lascisternas recogían el agua de lluvia a través del compluvium, y se depositaban en el impluvium,y desde allí se dirigía hacia la cisterna. Un sistema semejante se localiza en los peristilos, donde el agua se recogía en los canales que bordeaban los pórticos desde donde pasaba a la cisterna.
El acceso a las cisternas domésticas se realizaba mediante un orificio que se cubría con un cilindro de piedra o cerámica, denominada puteali.
Las fuentes naturales estaban preparadas e incluso decoradas con fachadas y precedidas de un estanque.
Otra manera eran las presas, y sus técnicas de construcción varían y pueden ser de varios tamaños y tipos, desde hechas con tierra hasta de albañilería.
Los acueductos
El más antiguo de Roma es el denominado Aqua Appia (312 a.C.) y el primero construido sobre arcos es el Aqua Marcia (144 a.C.). Antes de la construcción de los 11 acueductos de Roma se usaban las aguas del Tiber, de pozos y de fuentes.
Un acueductos consta de un lugar de captación (presa, fuente…), una canal (specus), sifones, substructiones y opera arquata, arquetas de decantación y castella aquarum.
El specus es un canal de abastecimiento, que iba cubierto si era de consumo urbano y a cielo abierto si era de uso agrícola; su sección podía ser rectangular, ovoide, trapezoidal o elíptica.
Lo más frecuente es una conducción de opus caementicium. A fin de asegurar su estanquidad, el interior iba recubierto de dos o varias capas de argamasa hidráulica.
Cuando el desnivel del terreno obliga a despegar el canal del suelo para reducir pendientes y mantener la cota necesaria o bien para salvar accidentes del terreno tales como barrancos, valles fluviales o simples depresiones se construyen las substructiones y opera arcuata. Si el desnivel era pequeño el canal de elevaba sobre muros (substructiones) pero si el desnivel era muy alto se recurría a la opera arcuata cuya robustez dependía de la fuerza de la corriente del agua, en cuyo caso las acuationes equivalían a auténticos puentes.
Para salvar los desniveles se construyeron los sifones. pero no tuvieron un papel muy importante debido a su elevado coste y mantenimiento. Y además si un punto elevado se interponía en la construcción se utilizaban túneles.
La distribución urbana
Las aguas llegaban al punto más alto de la ciudad y desde allí se distribuían por una red organizada. Pero en lugares con estaciones secas se construían cisternas para almacenar el agua que traía el acueducto. Estas cisternas podían ser de tres tipos:
- Unas eran grandes salas con pilares y columnas (fig.55).
- Depósitos con formas de galerías abovedadas.
- Cisternas formadas por una serie de galerías abovedadas paralelas que se comunican entre sí.
Pompeya es el lugar donde mejor se conoce el sistema de distribución de agua. El specus del acueducto desembocaba en el castellum aquae, situado en al punto más alto de la ciudad. El agua atraviesa una rejilla para filtrar impurezas y pasaba bajo una lámina de plomo para ir a tres tipos de conductos (uso doméstico y particular; aprovisionamiento de monumentos públicos como termas; y fuentes decorativas) (fig.56).
Las canalizaciones eran tubos de plomo, que podían ir sellados e identificaban el monumento de destino, el fabricante, propietario y en los acueductos de Roma, también el nombre del emperador. Los conductos también podían realizarse con tubos cerámicos que se embutían unos en otros sellando las uniones con mortero de cal.
La distribución urbana de tuberías de plomo discurría bajo las aceras y atravesaban otros castella aquae secundarios que rompían la gran presión provocada por el desnivel y cuyo sistema era el de los sifones.
La evacuación de las aguas
Es evidente que el agua excedentaria debía evacuarse y lo mismo sucedía con los restos contaminados por su uso. Para ello existía las ciudades una importante red de cloacas que solían desembocar en una mayor, en Roma se conocía como Cloaca Máxima.Suelen seguir el trazado de las vías principales, pueden cubrirse mediante bóveda, con dos tegulae, dos losas en triángulos o bien una losa plana.
En Pompeya sólo había red de cloacas en la zona del Foro y la evacuación del sobrante de aguas y aguas sucias se eliminaba con las aguas sobrantes de las fuentes, lo que significaba un pequeño río constante en las calles; en algunas zonas se instalaban gruesas losas de piedra que permitían pasar de un lado a otro de la calle (fig. 57).
IMAGINERÍA MILITAR
Murallas y fortificaciones
Para algunos autores, la muralla era una línea de carácter mágico, delimitada mediante el rito a un jurado de la fundación que marca el paso entre la urbs y el agger, entre la ciudad y lo que no lo es, entre los ciudadanos y los que no lo son. Es imprescindible desechar la consideración tradicional de que las murallas corresponden únicamente a necesidades de defensa y seguridad.
Los recintos amurallados de época republicana están construidos con aparejo poligonal y las puertas son grandes bloques dispuestos por aproximación de hiladas o cubiertas con un gran dintel. A partir del siglo III a.C. se desarrollarán las formas monumentales de amurallamiento en las que se manifiestan las influencias griegas. En Paestum la muralla se construye por la técnica de emplecton, es decir con dos muros, el exterior de opus quadratum relleno de tierra y cascotes. En Falerii Novi (siglos III a. C.), la muralla está construida con aparejo regular isódomo y las puertas cubiertas con arcos de medio punto. Ya a finales del siglo II a.C. son las murallas de Perusia, de aparejo regular donde las puertas inician el proceso monumentalización que culminará en época julio-claudia.
La generalización del fenómeno de municipalización lleva consigo la transformación de las urbes en auténticos recintos amurallados (moenia), además la muralla no sólo se realizaba por definición estructural sino por seguridad.
Las puertas de esta época se llaman cavaedium y su estructura final es la evolución de las dobles puertas con un patio abierto entre ellas (siglos III a.C.). Estas puertas se cierran en la fachada exterior mediante sus sistema batiente o como un castillo que lo que transforma el interior en un patio cuadrangular rodeado de altos muros, que tiene dos acepciones, una defensiva (los atacantes quedaban atrapados) y otra ideológica (separaba rus y urbs). Las puertas interiores de las exteriores estaban flanqueadas por altas torres
Aunque la época augustea es de paz, hay una gran construcción de murallas, este hecho hizo relacionarlo con la idea de que cada colonia llevaba implícita su muralla. Aunque no es un hecho constatado, ya que Cartago careció de muralla durante siglos.
Los recintos de época augustea tienen unas características comunes, como las torres cuadrangulares, las puertas cavaedium, y la monumentalización de los accesos.
A partir de la segunda mitad del siglo III se constata en todo el Imperio la construcción de murallas de nueva planta y la refortificación de las antiguas, sobre todo siguiendo modelos militares.
También se puede asociar el fenómeno del amurallamiento tardío a invasiones bárbaras del siglo III.
Los campamentos
Las fuentes esenciales para el conocimiento de los recintos campamentales son de dos tipos:las fuentes escritas y restos arqueológicos, mucho más objetivos y que nos acercan a la auténtica realidad de estos recintos y de la vida que se desarrollaba en su interior.
De las escritas hay referencias por ejemplo en De Munitionibus Castrorum, redactado por Higinio, un agrimensor del ejército durante las campañas dacias de Trajano; otro texto es de Polibio que detalla un campamento contemporáneo a sus campañas de mediados del siglo II a.C.
Los restos arqueológicos provienen en su mayoría de lugares fronterizos. Un campamento puede definirse como un recinto fortificado que alberga tropas, bien estable (de mayor tamaño y con defensas) o temporal (más pequeño y de madera).
En lo que se refiere a su morfología, en época republicana son de forma cuadrada y en época imperial son más rectangulares redondeándose en las esquinas.
La construcción del ager empieza excavando un foso y levantando el terraplén. Las fosas (fossae) consisten en una o varias zanjas que rodean todo el perímetro y pueden ser simples en forma de V (fossa fastigata) o con uno o dos lados vertical (fossa punica) o compuestas en forma de W o la sucesión de varias trincheras (fig. 59).
El terraplén se construye con bloques de arcilla cubiertos con tierra y sobre él se levanta la empalizada (vallum) que son postes de madera clavados al suelo y atados entre sí. El camino interior se forra con madera y presenta accesos por las escaleras.
La muralla puede estar hecha de diversos materiales (piedra, madera, tierra…) o por la técnica de emplecton, que consiste en dos muros paralelos con un relleno de opus caementicium, y a lo largo del perímetro van las torres de guardia. En los recintos de madera de madera las torres también son de madera y en los pétreos las torres son cuadrangulares y ya aparecen las redondeadas en el siglo II.
Otro sistema de refuerzo son el titulum o muro situado frente a la puerta para defenderla. Las cuatro o seis puertas de la muralla están flanqueadas por torres con paseos de ronda entre ellas (fig. 59).
El interior del campamento se articula en cuatro vías principales que dan lugar a tres zonas perpendiculares donde se ubican los edificios; el principal está en el centro (Principia) y a sus lados está la residencia del comandante (Praetorium) y los graneros (horrea); otros edificios son el hospital (valetudinarium).
La fábrica o talleres aparecen generalmente en los campamentos de legionarios constan también de un patio central con depósito de agua y las estancias destinadas a los talleres de bronce, hierro, cuero, madera, cerámica, etc.
Los barracones o centuria están distribuidos por todo el recinto y crean manzanas. También los establos presentan una forma similar pero los pavimentos de guijarros y los canales unidos con un desagüe permiten su identificación.
Y finalmente a lo largo de la cara interna de la muralla están las letrinas y los hornos.
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