¿POR QUÉ ESCRIBIMOS?

AL NO PODER ACEPTAR QUE SOMOS LIBRES EN JAULAS, NOS MOVEMOS EN MUNDOS DE PALABRAS QUERIENDO SER LIBRES

TRADÚCEME

COMPAÑEROS DE LUCHA EN PLUMA AFILADA

AVISO TODOS LOS TEXTOS ESTÁN REGISTRADOS

Blog bajo licencia Creative Commons

Licencia de Creative Commons

TODOS LOS TEXTOS ESTÁN REGISTRADOS

POEMAS, CUENTOS Y ESCRITOS REVOLUCIONARIOS DE DANIEL FERNÁNDEZ ABELLA is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Unported License. Para utilizar primero y siempre sin ánimo de lucro ha de consultar al autor. Daniel Fernández Abella todos los derechos reservados.

viernes, 10 de febrero de 2012

LA LEYENDA DE JOSÉ

Thomás Mann escribió, en un estilo bíblico, la tetralogía, José y sus hermanos, basada en narraciones como las que siguen a continuación, basadas en sucesos que los judíos consideran como su historia.

El hijo mayor de Raquel, José, era el preferido de su padre, por lo que sus hermanos le tuvieron envidia y, ésta, aumentó cuando José, ingenuamente, les contó que había tenido un sueño:"Estábamos ocupados en el campo atando gavillas. Mi gavilla se alzó y se tuvo derecha, las vuestras la rodearon y se prosternaron ante ella".Y le dijeron sus hermanos: ¿Significa esto que reinarás sobre nosotros?". Otro día les contó otro de sus sueños: "He soñado que el sol, la luna y once estrellas se prosternaban ante mí". Su padre le regañó diciendo: "¡Haría falta, que viniéramos yo, tu madre y tus once hermanos a prosternarnos delante de ti!''.

Un día, Jacob envió a José para tener noticias de sus hermanos, que habían llevado los rebaños a pacer muy lejos. Sus hermanos viéndole llegar se dijeron: "He aquí el soñador, matémosle, arrojémosle a una cisterna, y diremos que una fiera le ha devorado, y así veremos qué será de sus sueños". Rubén dijo: "No derraméis sangre nuestra, arrojadle solamente en la cisterna". Pensaba darle libertad cuando sus hermanos hubieran partido. Judá dijo a sus hermanos "¿Qué ganaremos con hacerle perecer? Vendámosle a los mercaderes de la caravana que viene por nuestro camino". Los mercaderes compraron a José y lo llevaron a Egipto; allí lo vendieron a Putifar, jefe de los guardias del Faraón, que le tomó cariño y le hizo su intendente. Pero la mujer de su dueño lecalumnió e hizo que fuera enviado a la prisión real. El panadero y el copero del rey estaban encerrados en la misma prisión. Una noche, los dos tuvieron un sueño. Al día siguiente andaban tristes, porque no encontraban a nadie que les explicara significado del sueño. José se encargó de hacerlo. El copero había visto una vid, de la cual habían salido tres ramas, luego flores, por último racimos de uvas que había exprimido en la copa del Faraón. Finalmente, le habían dado la copa. José le dijo: "Las tres vides representan tres días. Dentro de tres días pondrás la copa en manos del Faraón. Acuérdate de mí cuando hayas vuelto a su gracia y haz que salga de la prisión''.

El panadero había soñado que llevaba a la cabeza tres cestas de pan blanco, la más alta estaba llena y los pájaros acudían a picotear. José le dijo: "Las tres cestas representan tres días. Dentro de tres días, Faraón te mandará cortar la cabeza, que cuelguen tu cadáver y las aves de rapiña te devorarán". La predicción se cumplió. El panadero fue condenado a muerte y el copero volvió a su cargo, pero se olvidó de José.

Dos años más tarde, Faraón tuvo un sueño. Vio siete vacas, gordas y lucidas, salir del Nilo y pastar a orillas del agua. Luego otras siete vacas, delgadas y de horrible aspecto, salieron a su vez y devoraron a las vacas gordas. Faraón volvió a dormirse y tuvo otro sueño. Siete espigas de trigo, llenas y hermosas, brotaban en un mismo tallo. Luego siete espigas, macilentas y desecadas por el viento, crecieron al lado y se tragaron a las espigas llenas.

Al día siguiente el rey mandó llamar a los adivinos, pero ninguno pudo explicar los sueños. El copero se acordó de José y habló de él a Faraón. Mandáronle llamar: "Los dos sueños, - dijo José-, significan lo mismo. Dios anuncia al Faraón lo que va a hacer. Las siete vacas gordas y las siete espigas llenas son siete años de abundancia, las siete vacas delgadas y las siete espigas vanas son siete años de hambre. Va a haber siete años de abundancia en Egipto, y luego vendrán siete de malas cosechas que devastarán el territorio. Que el rey nombre, por tanto, un buen intendente, que envíe comisarios a recoger el quinto de las cosechas del Egipto durante los años de abundancia y se hagan aprovisionamientos de trigo para los años de escasez".
Faraón dijo a José: "Puesto que Dios te ha mostrado todas esas cosas, nadie tan inteligente como tú para hacerte jefe de mi casa y que todo mi pueblo obedezca tu mandato". Se quitó el anillo y lo puso en la mano de José, mandó que le vistieran con delicado lino y le colgó al cuello un collar de oro. José, nombrado primer ministro, mandó hacer provisiones de trigo por todo Egipto y que se construyeran innumerables bodegas para almacenar el grano



No hay comentarios:

Publicar un comentario