Mi vida, mi todo, mi otro yo. No sé como escribir a tu
divina persona pues los seres mortales no estamos capacitados para llegar a las
faldas ni a las huellas de los seres inmortales que nos inspiráis, divinas
musas, poemas, cuentos, canciones.... sois nuestro sustento y a la vez nuestra
perdición. Sustento porque nos dais una razón para vivir, pero perdición pues
la vida sin vosotros es una amarga, lenta y dolorosa muerte.
Eres la blanca paloma que rompe las cadenas a las que me ata
la esclavitud de la realidad, eres la palabra que resucita mi cadáver ya
desecho por el tiempo, eres las rosas rojas que se depositan en mi tumba y son
salpicadas por las gotas de la lluvia de los dioses que lloran al recordar este
romance tan imposible de realizarse.
Si he resuelto vagar si rumbo en la distancia, hasta que pueda volar a tus brazos y pueda considerarme enteramente en casa contigo y pueda enviar mi alma abrazada por ti al reino del espíritu si, infortunadamente así debe ser – tu debes dominarte mas al conocer mi fidelidad a ti, nunca puede otra poseer mi corazón,
Perdona si mis palabras son torpes, si entre mis balbuceos puedes encontrar los millares de sentimientos que intento mostrarte y regalarte este corazón enamorado pues ya no me pertenece desde que caí en tu hechizo y te convertiste en la única razón de mi existencia, en mi único aliento, en mi único sustento que me ata a este mundo, divino ángel del cielo que Dios dejó abandonado en esta fría tierra inhóspita y desalmada.
Perdona si te molesto en este momento, pero no puedo dejar
de pensar en tu persona, siempre fría como una mañana de invierno pero que hace
derretir el hielo para dejar florecer las rosas de las próximas primaveras, tú, siempre tan firme y esbelta como un roble y tan bella como un rosal en flor, que, a pesar de tus espinas, produces placer entremezclado con dolor, pues no pueden existir estos dos elementos por separado.
Espero de todo corazón que recibas esta carta y que seas comprensiva; que correspondas con tu amor toda esta vorágine de sentimientos y palabras que pugna por salir las primeras de mis labios resecos, ansiosos de beber la hiel de los tuyos y tu dulce néctar que resucita a cualquier muerto.
Permanece en calma, solo a través de la tranquila contemplación de nuestra existencia podremos alcanzar nuestro objetivo de vivir juntos. Se paciente .Ámame hoy, ayer, todos los días de nuestras existencia en el mundo terrenal y que nuestros espíritus se unan en uno solo cuando llegue el último día para ser un solo ser en el firmamento.
¿Y cómo terminar esta carta sin meter la pata, sin
ofenderte? intentaré ser breve en mi explicación: eres como el polen de
primavera que hace florecer nuevas flores en la próxima era; eres como el sol
cuyos rayos lamen la naturaleza creando una explosión de calor y belleza, eres la
vida por algún dios otorgada, por todos querida, por todos temida si es arrebatada.
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