martes, 22 de septiembre de 2015

LA GOMA

  Cristóbal Colón se sintió muy sorprendido cuando vio jugar a las indígenas sudamericanos con una pelotas que botaban en el suelo. Los nativos confeccionaban estas pelotas con la resina de unos árboles que crecían en Brasil: eran los árboles del caucho. Colón trajo este producto a Europa, sin imaginar el papel que jugarían en los siglos venideros.
El uso práctico comenzó cuando el británico Priesley se dio cuenta de que esta goma podía borrar los trazos de un lápiz. En 1823, el escocés MacIntosh, patentó unos vestidos que tenían una capa de goma entre los tejidos, lo que impermealizaba la tela. Pero, no tuvo un éxito completo, puesto la tela, así tratada, con el calor se volvía pegajosa, pero, con el frío, se endurecía demasiado. El norteamericano Charles Goodyear-1800+1860- hizo muchos ensayos tratando de evitar estos inconvenientes y, como ha ocurrido tantas veces en la vida de los experimentadores, intervino el azar. Goodyear, sin darse cuenta, volcó una mezcla de goma y azufre en una estufa que estaba muy caliente. Se sorprendió al comprobar que la mezcla se había secado al instante, incluso, mientras estaba caliente. Repitió una y otra vez su experiencia y la goma NO se volvía pegajosa; por el contrario se había vuelto tan suave y elástica como el cuero. Así comenzó la industria del caucho.
        Bautizó el proceso con el nombre de vulcanización, recordando a Vulcano, el dios romano del fuego. Pese a que patentó su procedimiento en 1844, debió litigar doce años antes de obtener su reconocimiento; su nombre ha perdurado por el neumático de automóviles que se vende con su nombre, aunque el diseño inicial lo hizo Paul Lichtfield.
        Pero, retrocediendo en el tiempo, debemos situarnos en el año 1879, para conocer la estructura de la goma. El científico francés Bouchardat hizo el siguiente experimento: calentó la goma en ausencia de aire y obtuvo un líquido, cuya molécula estaba compuesta por 5 átomos d Carbono y 8 átomos de Hidrógeno.
        Le dio el nombre de isopreno.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

VÍCTOR JARA

Tras la muerte de Allende, los militares apuntan un cañón contra la universidad y disparan a la rectoría. No hay resistencia: estaban desarmados. Destrozan puertas y cerrojos y toman prisioneros a los 600 que encontraban allí, Víctor Jara entre ellos.

Víctor Jara fue salvajemente torturado antes de ser asesinado por los golpistas chilenos un 16 de septiembre de 1973. Los militares no perdieron el tiempo, El Estadio Chile, se fue llenando de estudiantes, profesores con las manos entrelazadas en la nuca fueron llenando el Estadio, eran quienes habían resistido en la universidad en defensa de legitimo Gobierno de Chile, esto ocurría el día 12 de septiembre, 4 días después Víctor Jara era asesinado.

Pronto un oficial reparo en la presencia de Víctor Jara:

-¡A ese hijo de puta me lo traen para acá!
-¡Así que vos sos Víctor Jara, el cantante marxista, comunista concha de tu madre, cantor de pura mierda!
-gritó el oficial.

Le golpearon una y otra vez con violencia criminal, patadas, puñetazos, culatazos, él no perdía la compostura, incluso sonreía, lo cual provocaba más al criminal uniformado, que sacó la pistola, todos pensaron que lo iba a matar delante de todos, pero no, le golpeo con la pistola hasta destrozarle el rostro, cuando el hijo de su madre, se cansó de golpear a cantante ordeno que lo llevasen y lo matasen si se movía, jugaron a la ruleta rusa antes de asesinarlo.

Asesinaron su cuerpo con 44 balas asesinas, pero su voz continuara siempre viva, será, es un referente de lucha de los oprimidos. Dónde derramó su sangre ayer, hoy lleva su nombre: Estadio Víctor Jara.

Te recuerdo compañero de la lucha y el canto
cuando entonabas con tu guitarra letras de libertad
frente a la barbarie, la guerra, la tortura, el espanto
que Pinochet instauraba con crueldad

Te recuerdo con tus cantos revolucionarios
llamando a desalambrar 
frente a los abusos de la patronal
recordando que la calle es del campesino y del proletario

Te recuerdo reclamando el derecho a vivir en paz
Cantando las verdades verdaderas
Del que morirá cantando por el socialismo y la libertad
frente a bombas imperialistas extranjeras

Te recuerdo con la guitarra como fusil que disparaba
verdades, como cantautor de la revolución
del chileno consecuente

que nunca bajó la cabeza y agachó la mirada
que entonó como himno y como canción
el lema: Allende, el pueblo te defiende

Te recuerdo, compañero y no te olvidaré de mi memoria
fusilado y asesinado, pero nunca silenciado
en mi recuerdo huella imborrable de la historia
de un pueblo que no olvida su pasado

Víctor Jara

miércoles, 9 de septiembre de 2015

SIRIA: ALGUNOS DATOS DE INTERÉS PARA ENTENDER EL CONFLICTO


Siria tiene una distancia máxima de este a oeste de 830 km y de 740 km de norte a sur. A lo largo de la costa mediterránea (193 km), se extiende una estrecha llanura que penetra 32 km hacia el interior. Paralela a esta llanura se encuentra el Yebal an-Nusayriyah, una estrecha cordillera de montañas y colinas, al sur de la cual y a lo largo de la frontera con el Líbano, están las montañas del Antilíbano, donde se localiza el monte Hermón (2.814 m), el punto más alto del país. La cordillera del Antilíbano va disminuyendo al internarse en la región ondulada de los Altos del Golán (invadidos por Israel en 1967 durante el transcurso de la Guerra de los Seis Días) en la zona suroccidental de Siria. La mayor parte del resto del país la ocupa una meseta que está dividida en el noreste por el valle del río Éufrates (conocido en Siria como al-Furat). La superficie de la meseta situada al norte del Éufrates conforma la llanura de al-Jazirah y la meseta semicircular del sureste es el desierto Sirio.

El Éufrates, el río más largo de Siria, fluye diagonalmente atravesando el país desde Turquía en el norte hasta Irak en el este. El segundo río más largo, el Orontes, nace en la parte libanesa de las montañas del Antilíbano y se dirige hacia el sur a través del oeste de Siria hasta alcanzar Turquía.

En una Siria atacada se establecerá también un Gobierno títere indirecto que gobernará una sociedad fragmentada y en permanente lucha. Y sin negar la evidente sagacidad que supone este maquiavelismo geopolítico estadounidense, la norma política de los Estados Unidos de Norteamérica, aunque  (en sentido ideológico-teológico) se defina como "generador" (el "Destino Manifiesto", la idea de llevar la democracia y la libertad a todos los rincones de la Tierra, empezando por la propia "Unión"), y teniendo en cuenta que otros imperios depredadores también se han definido como generadores en este mismo sentido metapolítico, estas ideologías o "autocosmovisiones" de los propios Estados imperialistas, no pueden negar que esto es, sentido positivo, histórico, político real de su quehacer histórico, Estados Unidos es un imperio depredador.

Detrás de esta guerra, parece renacer la vieja aspiración de remodelar el Medio Oriente y Asia Central por parte de las cancillerías occidentales, pretendiendo instaurar regímenes democráticos, laicos, constitucionalistas y multipartidistas. Solo una sombra de duda parece detener una intervención occidental directa: no tener claridad sobre quiénes componen realmente la oposición, y por lo tanto, correr el riesgo de perder el control sobre la transición. Igual que sucedió en Libia, donde el gobierno de transición prácticamente ha muerto.

HISTORIA DE LA SIRIA DE AL ASAD

En 1963 una revolución popular llevó al poder al Partido Baath Árabe Socialista, fundado en 1947 por el militante nacionalista Michel Aflaq, de origen cristiano. En noviembre de 1970 el general Hafez al-Assad asumió el poder e introdujo reformas en las estructuras económicas y sociales. El Quinto Congreso Regional del Partido el Baas definió a los países árabes como «regiones» de la Nación Árabe, nombró a Assad secretario general y propuso «acelerar las etapas hacia la transformación socialista en los diferentes campos». Esta orientación fue institucionalizada en la nueva Constitución, aprobada en 1973.

Siria participó activamente en las Guerras Árabe-Israelíes de 1967 y 1973, durante las cuales las fuerzas israelíes ocuparon la meseta del Golán. Integró junto con Argelia, Yemen y la OLP, el Frente de la Firmeza, que se opuso a la política estadounidense en la región y a los acuerdos de Camp David (ver Egipto). Sus tropas compusieron la mayor parte de la Fuerza Árabe de Disuasión, que en 1976 intervino para evitar una partición del Líbano.

En 1978, en virtud de un acercamiento de la fracción siria e iraquí del Baath, se avanzó hacia la creación de un estado único, pero el proyecto fracasó al intentar unificar las dos ramas del partido. A fines de1979 la rama siria censuró a la Hermandad Musulmana (un grupo integrista) tachando a sus miembros de «agentes sionistas».

En 1982 el gobierno lanzó una ofensiva a cargo del ejército; miles de miembros de la Hermandad murieron y el gobierno sirio acusó a Irak de haber armado a los rebeldes. En abril fue cerrada la frontera entre ambos países.

En 1980 se produjo una alianza entre Arabia Saudita, Irak y Jordania. El enfrentamiento entre este grupo y Siria se agravó al comenzar la guerra entre Irán e Irak. El gobierno sirio reprochó a Irak haber desencadenado el conflicto, y «desviar la atención del problema central de la región»: la cuestión palestina. A fines de ese año, aumentaron las tensiones entre Jordania y Siria, acusada la primera de apoyar a la Hermandad, poniendo a ambos estados al borde de la guerra.

En 1981 estalló en el Líbano la «crisis de los misiles» cuando las tropas de la Falange Cristiana intentaron extender su autoridad a la ciudad libanesa de Zahde. Una Fuerza Árabe de Disuasión comandada por Siria intentó impedir este avance. Siria instaló en el Líbano misiles soviéticos tierra-aire SAM-6, lo que provocó la reacción israelí. La crisis finalmente fue superada, pero en 1983 Israel invadió el Líbano, y destruyó las bases de misiles sirios. El gobierno de Damasco mantuvo sus fuerzas estimadas en 30 mil efectivos en territorio libanés, y condicionó su retirada a la previa evacuación de todas las tropas israelíes.

La caída del precio del petróleo agravó aún más los problemas económicos generados por la guerra, lo cual obligó al gobierno, en 1984, a implantar una férrea política de austeridad.

En 1985, al-Assad renovó por siete años su mandato. En esas elecciones obtuvo 99,8% de los votos (porcentajes similares a los de 1971 y 1978). A pesar de esto, en 1987 se produjo una crisis política que obligó a renunciar al primer ministro, Abdul Rauf al-Kassem, acusado de corrupción.

En mayo de 1990 Siria restableció sus relaciones diplomáticas con Egipto. Algunos observadores atribuyeron esta circunstancia a la disminución del apoyo militar de la URSS a Damasco.

Cuando Irak invadió Kuwait, Siria se alineó rápidamente con la alianza anti-iraquí y envió tropas a Arabia Saudita. Las relaciones diplomáticas con Washington mejoraron notoriamente. En el marco de la crisis, Siria aumentó su influencia en el Líbano y logró fortalecer en ese país un gobierno aliado y desarmar a la mayoría de las milicias autónomas.

En mayo de 1991 Siria y Líbano firmaron un acuerdo de cooperación por el cual Siria reconoció a Líbano como un Estado independiente y separado, por primera vez desde que ambos países se independizaron de Francia.

El 2 de diciembre de 1991, al-Assad fue reelegido por cuarta vez con 99,98% de los votos. Su candidatura fue la única presentada.

Siria se mantuvo alejada de las primeras etapas del proceso de paz en la región, que permitió la instauración de la autonomía limitada para Palestina y la firma de los acuerdos entre Israel y Jordania enjulio de 1994.

En junio de 1995, en negociaciones oficiales con Israel, la devolución de la meseta del Golán a Siria no se concretó porque Tel Aviv pretendía mantener indefinidamente una presencia militar limitada en la región. En octubre, una emboscada tendida por Hezbollah a tropas israelíes en el sur de Líbano volvió a complicar las negociaciones.

En el marco de una política de estímulo al sector privado, se abrieron al capital privado sectores estatales clave, como la energía eléctrica, la producción de cemento y la industria farmacéutica.

Sorpresivamente, en noviembre de 1997, ante la amenaza de una nueva intervención militar de Washington en Irak, Damasco intensificó relaciones con Bagdad, en una estrategia contra la alianza turco-israelí en rápida consolidación. En abril de 1998, Irán se sumó a las conversaciones sirio-iraquíes sobre asuntos de seguridad.

Al-Assad fue reelecto para su séptimo período consecutivo de cinco años en 1999. En marzo de 2000 todos los miembros del gabinete presentaron su renuncia y Mohamed Mustafa Miro, un veterano líder del Baath, fue designado como el nuevo primer ministro.

La repentina muerte de al-Assad el 10 de junio sumió al país en duelo por el único gobernante que conocieran la mayoría de los sirios. Lo sucedió su hijo, Bashar al-Assad, quien asumió en julio la presidencia.

Entre las primeras medidas del nuevo mandatario, en abril de 2001 se aprobó oficialmente el establecimiento de la banca privada y poco después se habilitó a una estación de radio privada para transmitir, aunque sólo música y ningún contenido político.

En mayo, el papa Juan Pablo II visitó Siria y en la ceremonia de bienvenida, al-Assad lanzó un fuerte ataque contra Israel al comparar el sufrimiento de los árabes a la persecución de Jesucristo. En respuesta, Juan Pablo II hizo un llamado a favor de una nueva actitud de entendimiento y respeto entre cristianos, musulmanes y judíos.

Siria alcanzó en octubre de 2001, con apoyo unánime de Asia y África, su asiento en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, pese ala oposición de Israel.

Las relaciones internacionales de Damasco fueron intensas durante 2001. Luego de grandes presiones del gobierno libanés, desocupó Beirut y se replegó hacia otras partes del Líbano. En agosto, el premier Miro visitó Irak, en el primer viaje de alto nivel a ese país desde que las relaciones se tensaran por el apoyo sirio a Irán durante la guerra de 1980-1988.

La excarcelación en noviembre, tras una reclusión de más de dos décadas, de decenas de presos políticos pertenecientes a la Hermandad fue saludada por Amnistía Internacional como un «satisfactorio paso adelante hacia el respeto de los derechos humanos en Siria». Detenidos en condiciones degradantes, casi todos los presos habían permanecido incomunicados además de haber sufrido torturas y malos tratos.

En abril de 2002, la estación siria de radares en el Líbano fue atacada desde aviones israelíes, que respondieron a un ataque de la guerrilla de Hezbollah, despertando el temor de una escalada militar que sin embargo no se produjo.

En mayo, el alto funcionario estadounidense John Bolton incluyó a Siria en la lista de países integrantes del llamado «eje del mal», acusando a Damasco de intentar obtener armas de destrucción masiva. En abril de 2003, con la invasión de Irak ya en marcha, Washington amenazó a Siria con sanciones económicas y diplomáticas, afirmando que el régimen ayudaba a fugitivos iraquíes. El gobierno sirio rechazó las acusaciones.

En enero de 2004, al-Assad se convirtió en el primer gobernante sirio en visitar Turquía, en un viaje que marcó el inicio del deshielo de las relaciones con Ankara.

El 8 de marzo el Comité para la Defensa de las Libertades Democráticas y Derechos Humanos de Siria organizó una inédita manifestación en Damasco en demanda de democracia y libertad para prisioneros políticos. Dos integrantes de la organización, Ahmad Jazen y Hassan Wattfa, fueron detenidos y pasaron dos meses en prisión.

En abril, hubo una explosión en un edificio que había sido sede de la ONU en Damasco; en el subsiguiente tiroteo murieron un civil, un policía y dos de los cuatro activistas involucrados. El gobierno atribuyó el atentado a fundamentalistas islámicos.

Un mes más tarde, Washington impuso sanciones económicas a Siria debido a lo que consideró su apoyo al terrorismo y su negativa a impedir el ingreso de guerrilleros a Irak desde sus fronteras.

Tras el asesinato del ex premier libanés Rafik Hariri en Beirut, en febrero de 2005, creció la presión de parte de Washington, Paris, la ONU y la oposición libanesa para que las tropas y agentes de inteligencia sirios abandonasen de inmediato Líbano. Al-Assad, en cumbre con Émile Lahoud, su similar libanés, acordó un calendario parcial estableciendo que, para las elecciones generales de mayo en Líbano, todas las tropas sirias se habrían retirado.

A principios de febrero de 2006 manifestantes sirios incendiaron el edificio donde se encontraban las embajadas de Dinamarca y Noruega durante una protesta por la publicación, en un diario danés, de caricaturas satirizando al profeta Mohamed. Las embajadas de Chile y Suecia, ubicadas en el mismo edificio, sufrieron daños menores. Una semana más tarde, Dinamarca cerró su embajada en el país, y acusó a las autoridades sirias de no garantizar un mínimo de seguridad a los funcionarios daneses.

En mayo de 2007, Bashar al-Assad fue reelegido para ocupar el cargo de presidente por siete años más. Habiendo sido el único candidato, consiguió el 97,62% de los votos.

En agosto, al-Assad reafirmó el interés del país en recuperar en su totalidad la meseta del Golán. «Nuestro deseo de paz no significa que renunciemos a nuestros derechos. No aceptaremos sino la recuperación de todo el Golán hasta la línea del 4 de junio de 1967» Las declaraciones se dieron como preámbulo de una posible reapertura de las negociaciones de paz con Israel, interrumpidas desde 2000 por las diferencias relativas al Golán.

LOS RECURSOS NATURALES DE SIRIA

Las riquezas gasiferas de Siria y su ubicación geográfica como puerta hacia todo el petróleo del Medio Oriente y Asia, despiertan los apetitos de gobiernos y grandes transnacionales occidentales.


En Siria, los principales minerales en cantidades suficientes para la explotación comercial son el petróleo, el gas natural, el fosfato, el asfalto y la sal. También hay pequeños depósitos de carbón, mineral de hierro, cobre, plomo y oro, en especial en las regiones montañosas. Las mejores tierras de cultivo se encuentran en la región costera y en algunas zonas de los valles de los ríos Orontes y Éufrates.

De acuerdo al International Fertilizer Development Center (IFDC), el Centro Internacional de Desarrollo de Fertilizantes citando a Gecopham, la Compañía General para Fosfatos y Minas estatal siria, los depósitos de rocas de fosfato descubiertos en Siria sobrepasan los 2,000 millones de toneladas. Según Gecopham, los yacimientos de fosfato del este del país son los más importantes. La producción anual de concentrado de fosfato es de 3.85 millones de toneladas a partir de 2005, exportándose el 80% y empleándose el 20% restante en producir ácido fosfórico y también fertilizantes de fosfato en la planta Fertilizantes Homs en la ciudad del mismo nombre.

Los fosfatos pueden ser utilizados para diversos usos y aplicaciones, como son:

  • Agente de saponificación de grasas
  • Decapante de pinturas
  • A nivel industrial para limpiar metales.
  • Se utiliza en maquinas de lavado
  • Fabricación de quesos, emulsionante
  • Levadura artificial en panadería
  • Se utiliza como acidulante para la preparación de la masa del pan
  • Como abrasivo en pastas de dientes
  • Detergentes
  • Dispersante en fabricación de cementos y ladrillos

OTROS DATOS DE INTERÉS SOBRE SIRIA

  • La familia Al Assad pertenece a la tolerante orientación alawí del Islam.
  • Las mujeres sirias tienen los mismos derechos que los hombres al estudio, salud y educación. 
  • En Siria las mujeres no tienen la obligación de llevar el Burga. La Sharia (ley Islámica) es inconstitucional. 
  • Siria es el único país árabe con una Constitución Laica y no tolera los movimientos extremistas islamistas.
  • Alrededor del 10% de la población siria pertenece a alguna de las muchas ramas cristianas presentes desde siempre en la vida política y social. 
  • En otros países árabes la población cristiana no llega al 1% debido al hostigamiento sufrido. 
  • Siria es el único país del Mediterráneo que sigue siendo propietario de su empresa petrolera, que no la ha querido privatizar. 
  • Siria tiene una apertura hacia la sociedad y cultura occidental como ningún otro país árabe. 
  • A lo largo de la historia 5 Papas fueron de origen sirio. La tolerancia religiosa es única en la zona. 
  • Antes de la guerra civil Siria era el único país pacífico en la zona sin guerras ni conflictos internos.
  • Siria es el único país árabe que no tiene deudas con el Fondo Monetario Internacional. 
  • Siria es el único país del mundo que ha admitido refugiados iraquíes sin ninguna discriminación social, política o religiosa. 
  • Bashar Al Assad tiene una aprobación extremadamente popular.
  • Siria posee unas reservas de petróleo de 2.500 millones de barriles, cuya explotación está reservada a las empresas estatales.
  • En Siria las mujeres no tienen la obligación de cubrirse el rostro con un velo, llevar burka ni chador. 
  • Las mujeres sirias tienen los mismos derechos que los hombres al estudio, salud y educación.

lunes, 7 de septiembre de 2015

LA ASPIRINA

A fínales del pasado siglo, Bayer & Co. era una modesta empresa que fabricaba tintes y colorantes a partir del alquitrán de carbón, y que tenía un departamento farmacéutico en el que trabaja el químico Félix Hoffmann, de 29 años. Trabajaba buscando una aplicación de los compuestos fenólicos, subproductos que se obtenían en la fabricación de anilina; su idea era preparar un derivado del ácido salicílico que no tuviese efectos secundarios. Su padre, que padecía de una artritis reumatoide, sería el primer beneficiado si lo conseguía, porque el salicilato sódico que se utilizaba para tratar su enfermedad, no sólo le provocaba náuseas, sino que las dosis usuales le resultaban intolerables su para su estómago.

En agosto de 1897 Hoffmann logró el ácido acetilsalicílico y lo dio a probar a su progenitor, quien obtuvo la recompensa del alivio de sus dolores sin efectos secundarios. Tras muchos ensayos de estabilidad, pureza, eficacia, tolerancia y de todo tipo realizados por el farmacólogo Heinrich Dresser, dos años más tarde, el nuevo producto sería comercializado por la empresa Bayer con el nombre de aspirina, que pronto se convertiría el medicamento más popular.

El antecedente natural de la aspirina está en la corteza del sauce.
Unos 400 años a.C., el médico griego Hipócrates de Cos, recomendaba mascar la amarga corteza de ese árbol para aliviar el dolor y la fiebre. Más adelante, tanto los escritos de Dioscórides y Plinio el Viejo (siglo I) como Galeno (siglo V) recogieron el uso medicinal de las hojas del sauce. En 1763, el reverendo Edward Stone, utilizó un extracto de la corteza de Salix alba para reducir la fiebre de 50 pacientes; pero, solo en 1828, J. A. Buchner, profesor de farmacia, descubrió que la salicina producía tales, un producto amarillo que podía ser extraído de la corteza del sauce.

El francés Gerhardt, en 1853, obtuvo por primera vez el AAS (así se suele abreviar el ácido acetilsalicílico), aunque en una forma impura y que se descomponía. Hoffmann, que había seguido trabajando en su descubrimiento, simplificó el método haciéndolo posible industrialmente, lo mejoró y obtuvo el ácido en forma pura y estable. Era un polvo cristalino, sedoso y blanco, de sabor amargo.
A comienzos del siglo XX los médicos de todo el mundo recetaban ya aspirina para una gran variedad de dolencias, desde dolores de cabeza hasta tuberculosis, pasando por gripes, gonorrea y cualquier tipo de inflamación, como amigdalitis, rinitis, artritis o cistitis. Pero el uso más trascendental del medicamento había de llegar en la segunda mitad del siglo.En 1954 científicos de la Universidad de Frankfurt comprobaron que el AAS evitaba la agregación de las plaquetas de la sangre, impidiendo la coagulación, lo que constituyó la primera pista para su utilización en la prevención de la formación de trombos que, como se sabe, pueden taponar una fina arteria coronaria que al quedar semiobstruida, por falta de riego, originaba un infarto de miocardio. Pronto vinieron los resultados estadísticos que reflejaban las ventajas de utilizar Aspirina para el corazón más tarde se comprendió su efecto. Mientras continúa utilizándose como analgésico, antipirético y antiinflamatorio, los especialistas afirman que el más efectivo, seguro y barato de los medicamentos que pueden que pueden disminuir el riesgo cardiovascular es el ácido acetilsalícilico.

La palabra aspirina, se formó con la A de acetil y spir proviene de Spirae, el vegetal que contiene el principio activo de la salicina.

A comienzos, la Bayer vendía su producto en polvo, pero desde 1904 se empezó a vender como comprimidos, es decir, la popular aspirina ya es centenaria.

jueves, 3 de septiembre de 2015

RECORDANDO A SALVADOR ALLENDE

El golpe de Estado en Chile del 11 de septiembre de 1973 fue una acción militar llevada a cabo por las Fuerzas Armadas de Chile conformadas por la Armada de Chile, la Fuerza Aérea de Chile y el Ejército de Chile en conjunto con Carabineros de Chile para derrocar al presidente socialista Salvador Allende Gossens y al gobierno izquierdista de la Unidad Popular.

Allende fue presidente de Chile desde 1970 hasta el golpe de estado dirigido por el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973, día en que falleció en el Palacio de la Moneda, que fue bombardeado por los golpistas.

Salvador Allende perteneció a una familia de clase media acomodada. Estudió medicina y, ya desde su época de estudiante universitario, formó parte de grupos de tendencia izquierdista. Más tarde, alternó su dedicación a la política con el ejercicio profesional. Participó en la elección parlamentaria de 1937, y salió elegido diputado por Valparaíso. Fue ministro de sanidad del gabinete de Pedro Aguirre Cerdá entre 1939 y 1942. A partir de entonces se convirtió en líder indiscutible del partido socialista.

En 1952, 1958 y 1962 se presentó a las elecciones presidenciales. En la primera ocasión fue temporalmente expulsado del partido por aceptar el apoyo de los comunistas, que habían sido ilegalizados, y quedó en cuarto lugar. En 1958, con el apoyo socialista y comunista, quedó en segundo lugar tras Jorge Alessandri.

En 1964 fue derrotado por Eduardo Frei Montalba, que propugnaba un programa de "revolución en libertad", cuyos puntos sustantivos eran la reforma agraria, el establecimiento de un programa destinado a incrementar la participación de la ciudadanía, la chilenización del cobre (es decir, el control por el estado de los beneficios de su explotación) y la realización de una reforma educacional. La candidatura de Allende, que encabezaba el FRAP, conformado por la alianza de socialistas y comunistas, sólo suponía diferencias de ritmo y envergadura. El FRAP proponía nacionalizar la totalidad de las empresas cupríferas, transformándolas en propiedad social por medio del Estado, y una reforma agraria de mayor alcance.

El resultado de las elecciones presidenciales del 4 de septiembre de 1964 fue claro y definitivo. Eduardo Frei obtuvo el 56,9% de los votos, en tanto que Salvador Allende lograba el 38,93% del total. La "revolución en libertad" estaba concebida como un intento de modificar las estructuras fundamentales del país, pero en un marco de democracia y respeto al orden institucional. Las críticas que desde un comienzo surgieron hacia el gobierno de Frei tuvieron su origen en la naturaleza de las medidas a tomar. Para la derecha, las transformaciones propuestas tenían un repudiable carácter socialista. Para la izquierda, eran sólo intentos reformistas, condenados al fracaso por su propia banalidad.

En paralelo con el avance de importantes medidas sociales, el panorama político durante el gobierno de Frei Montalva fue de aumento de la polarización, incluso en el interior del Partido Democratacristiano, que sufrió importantes divisiones, así como el desligamiento de sectores de su juventud hacia posturas más vinculadas a la izquierda. Por fin, las elecciones parlamentarias de 1969 mostraron la nueva situación política del país, en tanto sus resultados apuntaron a perfilar tercios irreconciliables, en gran medida debido a la disminución del apoyo al centro político y el fortalecimiento de las opciones de izquierda y de derecha.



Esta situación se reflejaría con mayor claridad en las elecciones presidenciales de 1970, marcadas por el enfrentamiento de proyectos de sociedad antagónicos e imposibles de conciliar. En ellas resultó victoriosa la alianza de comunistas, socialistas, sectores del radicalismo y el MAPU en la llamada Unidad Popular, que estaba encabezada por Allende, con el 36, 3 % de los sufragios. El estrecho margen de diferencia con los votos recibidos por los otros dos candidatos, Jorge Alessandri por la derecha y Radomiro Tomic por la Democracia Cristiana, obligó a que la elección de Allende fuera ratificada por el congreso, en el que se enfrentó a una fuerte oposición. Por fin, el 24 de octubre de 1970, tras lograr el apoyo del Partido Demócrata Cristiano con la firma de un Estatuto de Garantías Democráticas que se incorporaría al texto constitucional, Salvador Allende fue proclamado presidente.

Desde la fecha de comienzo del mandato (el 3 de noviembre), las dificultades que el nuevo gobierno debió enfrentar fueron inmensas. Ya antes de la asunción presidencial se realizaron intentos por abortar el proceso, el más grave de los cuales terminó con el asesinato por parte de un comando de ultraderecha apoyado por la CIA del Comandante en Jefe del Ejército, general René Schneider, que era un decidido partidario de la subordinación del poder militar al civil.

A pesar de ello, la Unidad Popular, una vez en el gobierno, emprendió la realización de su plan de acción, el cual ponía énfasis en la profundización de las medidas reformistas iniciadas por la administración anterior. Así, se amplió el volumen de tierras expropiadas y se inició la socialización de importantes empresas hasta entonces en manos privadas, las cuales pasaron a ser dirigidas por cooperativas de trabajadores asesorados por funcionarios proclives al Gobierno. Además, se concretó la nacionalización del cobre, sin pago de indemnizaciones a las empresas norteamericanas, lo cual significó el enfrentamiento con los Estados Unidos, quienes a partir de ese momento apoyaron abiertamente a los grupos opositores al gobierno socialista.

Esta oposición se estructuró en distintos frentes; en lo político, en un parlamento en el cual representantes de derecha y democratacristianos actuaban unidos; en el plano de lo ilegal, en los grupos de carácter terrorista que dinamitaron torres de alta tensión y líneas férreas. A pesar de esta rígida oposición, el Gobierno de Allende contó con un apoyo importante por parte de la ciudadanía, en particular de los sectores populares, que se veían directamente beneficiados. En efecto, el Estado subsidiaba gran parte de los servicios básicos, además de apoyar a organizaciones de trabajadores, campesinos y pobladores urbanos en sus demandas de participación.

Este apoyo a la presidencia de Allende se demostraría claramente en las elecciones parlamentarias de 1971 y las municipales de 1973, en las cuales los partidos de la Unidad Popular crecieron en número de votos. Junto con ello, el discurso político de los partidos de izquierda fue adquiriendo tintes cada vez más radicales, en tanto que el enfrentamiento abierto con los grupos opositores se hacía realidad en las calles e indicaba una situación de lucha de clases a sus ojos inevitable.

Acciones de grupos como el MIR y sectores del Partido Socialista venían a confirmar este diagnóstico, al considerar urgente la creación y el fortalecimiento de instancias de "Poder Popular" que fueran alternativas a los estrechos marcos que la institucionalidad prefijaba para una posible construcción de una sociedad socialista. Este intento, conocido como la "Vía chilena al socialismo", conoció el interés y el apoyo de sectores de todo el mundo, en particular desde el Bloque Soviético, Cuba y los Países No Alineados, lo que se traducía en el envío de ayuda material y asesores industriales.

A pesar de todo ello, una serie de problemas vinieron a polarizar aún más a la sociedad chilena bajo la presidencia de Allende, en gran medida debido a causas económicas. La inflación se hizo incontrolable, ya que las alzas salariales y los gastos del Estado fueron financiados con emisión de circulante sin base de sustentación en la producción, la cual se vio disminuida y contraída como consecuencia del bloqueo iniciado por los Estados Unidos y el permanente conflicto que vivían muchas empresas, en virtual paralización permanente por la falta de recursos. A ello se agregaban problemas de distribución de alimentos y bienes, lo que hacía difíciles las condiciones de vida del común de la población.

Este clima de desabastecimiento y crisis, azuzado por los distintos sectores políticos, se tradujo en numerosas movilizaciones a favor y en contra del gobierno de Allende, la más importante de las cuales fue la paralización del yacimiento de cobre de El Teniente, junto a la huelga de los gremios de transportistas, que prácticamente inmovilizó el traslado de bienes de un punto a otro del país. A ello se sumaban conflictos en la universidad y en los colegios profesionales (médicos y profesores fundamentalmente), que dibujaban una división profunda en todos los ámbitos de la vida nacional.

Ante tal situación, el presidente decidió tomar, ya en 1973, medidas que sirvieran como vehículos de diálogo y negociación con la oposición democratacristiana, tales como el ingreso de importantes figuras militares al gabinete, representadas por el Comandante en Jefe, general Carlos Prats, y la oferta de realizar un plebiscito para consultar a la ciudadanía en torno a la continuidad del régimen o la convocatoria a nuevas elecciones. A estas medidas siguió un endurecimiento en las posiciones más radicales de la izquierda, que proponían al Primer Mandatario el cierre del Congreso y la utilización de Facultades Extraordinarias para gobernar.

La derecha y algunos sectores de la Democracia Cristiana consideraron la situación insoluble, por lo que decidieron, de forma más o menos abierta, recurrir al recurso del golpe de estado militar contra el presidente Allende. En junio de 1973 hubo un primer intento de golpe, conocido como "El Tancazo": un regimiento de blindados de la capital se alzó contra el gobierno, pero las fuerzas leales, encabezadas por Prats, lograron dominar la situación.

Finalmente, el 11 de septiembre de 1973, el general Augusto Pinochet encabezó un golpe militar, durante el cual bombardeó el palacio de la Moneda, sede del gobierno. El presidente Allende rechazó las exigencias de rendición y murió en el palacio presidencial. En 1990 su cuerpo fue exhumado de la tumba anónima en la que se hallaba, y recibió en Santiago un enterramiento formal y público.


Último Discurso de Salvador Allende, el 11 Sept 1973

Seguramente ésta será la última oportunidad en que pueda dirigirme a ustedes. La Fuerza Aérea ha bombardeado las torres de Radio Postales y Radio Corporación. Mis palabras no tienen amargura sino decepción Que sean ellas el castigo moral para los que han traicionado el juramento que hicieron: soldados de Chile, comandantes en jefe titulares, el almirante Merino, que se ha autodesignado comandante de la Armada, más el señor Mendoza, general rastrero que sólo ayer manifestara su fidelidad y lealtad al Gobierno, y que también se ha autodenominado Director General de carabineros. Ante estos hechos sólo me cabe decir a los trabajadores: ¡Yo no voy a renunciar! Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo la certeza de que la semilla que hemos entregado a la conciencia digna de miles y miles de chilenos, no podrá ser segada definitivamente. Tienen la fuerza, podrán avasallarnos, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza. La historia es nuestra y la hacen los pueblos.

Trabajadores de mi Patria: quiero agradecerles la lealtad que siempre tuvieron, la confianza que depositaron en un hombre que sólo fue intérprete de grandes anhelos de justicia, que empeñó su palabra en que respetaría la Constitución y la ley, y así lo hizo. En este momento definitivo, el último en que yo pueda dirigirme a ustedes, quiero que aprovechen la lección: el capital foráneo, el imperialismo, unidos a la reacción, creó el clima para que las Fuerzas Armadas rompieran su tradición, la que les enseñara el general Schneider y reafirmara el comandante Araya, víctimas del mismo sector social que hoy estará en sus casas esperando con mano ajena reconquistar el poder para seguir defendiendo sus granjerías y sus privilegios.

Me dirijo, sobre todo, a la modesta mujer de nuestra tierra, a la campesina que creyó en nosotros, a la abuela que trabajó más, a la madre que supo de nuestra preocupación por los niños. Me dirijo a los profesionales de la Patria, a los profesionales patriotas que siguieron trabajando contra la sedición auspiciada por los colegios profesionales, colegios de clases para defender también las ventajas de una sociedad capitalista de unos pocos.
Me dirijo a la juventud, a aquellos que cantaron y entregaron su alegría y su espíritu de lucha. Me dirijo al hombre de Chile, al obrero, al campesino, al intelectual, a aquellos que serán perseguidos, porque en nuestro país el fascismo ya estuvo hace muchas horas presente; en los atentados terroristas, volando los puentes, cortando las vías férreas, destruyendo lo oleoductos y los gaseoductos, frente al silencio de quienes tenían la obligación de proceder. Estaban comprometidos. La historia los juzgará.

Seguramente Radio Magallanes será acallada y el metal tranquilo de mi voz ya no llegará a ustedes. No importa. La seguirán oyendo. Siempre estaré junto a ustedes. Por lo menos mi recuerdo será el de un hombre digno que fue leal con la Patria.

El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni acribillar, pero tampoco puede humillarse.
Trabajadores de mi Patria, tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo en el que la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor.

¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores!

Estas son mis últimas palabras y tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano, tengo la certeza de que, por lo menos, será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición.



CHILE Y PINOCHET: EL GOLPE AMPARADO POR NIXON Y LA CASA BLANCA

El laboratorio chileno

Esa diferencia se consolidó por medio de otro factor que hizo de este golpe memorable.
Si bien es cierto que Allende estaba ensayando algo que no se había hecho antes, los que se tomaron el poder también tenían un proyecto nuevo: los llamados "Chicago Boys" llevaron los principios del economista estadounidense Milton Friedman a Chile antes de las experiencias neoliberales o neoconservadoras de las naciones de Occidente.

Los que se tomaron el poder, "tenían un profundo sentido de misión: eliminar el comunismo y crear un nuevo orden, un nuevo Chile", recuerda Alan Angell.

"Pinochet llegó con un plan económico que era casi diametralmente opuesto al de Allende", le dice a BBC Mundo el canadiense Kristian Gustafson.

Las dictaduras – ninguna que se sepa- consideran los males que acarrean en el entorno de los individuos que someten a su implacable acción : hijos que nacen en otras latitudes, que hablan un idioma distinto, que asimilan costumbres diferentes, es decir, que carecen de arraigo-Y, así. desde siempre, incluso en el siglo en que vivimos. Muchos libros se han escrito sobre el tema y no hay cuenta para los que es escribirán, aunque no todos dan un enfoque realista de lo que viven y sufren esos pueblos. Sobre el tema de Allende y la dictadura del innoble Pinochet, en España, pasan del centenar los libros editados.

LOM ediciones, para guiar al lector en el entramado de Milico, del escritor chileno José Miguel Varas, Premio Nacional de Literatura, ilustrando la contraportada, escribió lo que sigue:

“Algunas novelas se desmarcan por haber sabido encarnar la verdad íntima de una época. En ellas la Historia deja de ser mayúscula, se quiebra en historias múltiples y dice la magnitud de lo vivido por todos precisamente a través la vivencia singular. Son novelas generosas, prolijas en personajes, a la vez que ceñidas a un hilo: el del destino que urde cada vida cuando nos tocan tiempos tempestuosos.

Milico es quizás la novela del Golpe. Generosa sin duda, capaz de abrir los brazos a los personajes más dispares: a los ambientes más contrastados -militares y barberos, periodistas y campesinos, hombres y mujeres-. Compleja por su reparo en lo que todos tienen de más contradictorios: desde el milico a la antigua, forjado en la obediencia, que desacata una orden bajo el gobierno de Ibáñez, hasta el verdugo uniformado de los 70 que cree obrar por una sociedad más civilizada; desde el hijo de caballero que deviene en militante comunista hasta la madre que abandona al hijo por otra lealtad más fuerte. Novela increíblemente fina de oído, atenta al canto particular de cada una de sus criaturas, pues en Milico las conversaciones se escuchan, los personajes tienen voz y dejo. Quizás sea esa pluralidad de voces lo que da a Milico su categoría de una novela-mundo que no excluye a ninguna figura, cada cual aquí se encontrará.

Y en esa otra dimensión que es la literatura, escucharse es posible.”

La presencia del dictador Pinochet parece estará presente en Chile por muchos años, no solo por sus crímenes sino por ser el sátrapa más corrupto y cínico, de los que han gobernado en Latinoamérica y porque ha creado un país singular en el mundo entero al darle al territorio de los chilenos una estructura militar.

Patricio Orellana escribió un artículo titulado "La inteligencia militar y las regiones" y dice al comenzarlo: "Chile es el único país del mundo que reconoce sus regiones por las denominaciones ¡Primera! ¡Segunda! ¡Tercera! ¡etc! Igual como ellos designan a sus divisiones de mando militar.

Pero, lo curioso es que los políticos que han gobernado a Chile, desde la caída del honrado general Augusto Pinochet Ugarte, su nombre como militar, no han demostrado mayor preocupación por dejar que viva su recuerdo con esto de las regiones: nada hizo el ex Presidente Lagos y, según ha comentada a su paso por Madrid, la actual mandataria tampoco borrará el recuerdo la dictadura, porque mantendrá la numeración de las provincias chilenas. Además, ella, durante la ceremonia de transmisión del mando, escuchó el himno nacional, que dice "que Chile será de los libres o el asilo contra la opresión"- con el estilo de Bush, es decir, con la novedad de llevar su mano derecha sobre el corazón.